Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.

Dios nos ha dado el regalo más precioso: la vida. Cada día que despertamos es una oportunidad para amar, servir y glorificar a Dios. La vida es un don divino que debemos valorar y usar para hacer el bien a los demás y para vivir de acuerdo con los principios de la Palabra de Dios. Estamos en un mundo lleno de desafíos y pruebas, por esa razón es importante y fundamental que cada día que Dios nos regala recordemos el valor extraordinario que tienen. Este día quiero comenzar a hablar acerca de uno de los dones más preciosos que Dios nos da: la oportunidad de la vida. Primero quiero hablar acerca de La vida como un regalo divino: En Génesis 2:7, leemos las siguientes palabras: Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente. Genesis 2:7 En este versículo podemos ver como el mismo Dios sopló aliento de vida en las narices del primer hombre, Adán. Esto nos da la referencia de que la vida no es simplemente el resultado de procesos biológicos, sino un regalo divino de parte de Dios. Somos creación de Dios, diseñados a su imagen y semejanza, dotados de un propósito único en este mundo. Como segundo punto quiero hablar acerca de La oportunidad de crecer y aprender: Cada día que despertamos, se nos presenta la oportunidad de crecer y aprender. Dios nos ha dado mentes para comprender, corazones para amar y almas para buscar Su verdad. Por eso debemos aprovechar cada momento para crecer en conocimiento, sabiduría y gracia. Proverbios 1:5 nos reitera estas palabras: Oirá el sabio, y aumentará el saber, Y el entendido adquirirá consejo. Proverbios 1:5 El siguiente punto es La oportunidad de amar y ser amados: Juan 13:34 nos dice: Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. Juan 13:34 La vida nos brinda la maravillosa oportunidad de experimentar el amor en todas sus formas. Desde el amor de Dios que nos sustenta hasta las relaciones fraternales y familiares, cada día es una oportunidad para amar y ser amados. Sigamos el ejemplo de Jesús, quien nos amó primero. Y para terminar La oportunidad de impactar a otros: Nuestra vida tiene un alcance más allá de nosotros mismos. Cada día, interactuamos con personas que necesitan esperanza, amor y dirección. Se nos ha dado la oportunidad de impactar positivamente a otros, de ser una luz en medio de la oscuridad. Vivamos de manera que nuestro testimonio inspire y apunte a Dios. Por eso Mateo 5:16 nos dice: Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos. Mateo 5:16 Recordemos que la vida es un regalo que debemos apreciar y utilizar sabiamente. Agradezcamos a Dios por cada día, reconociendo la oportunidad que nos brinda para buscarlo, crecer en Él y ser instrumentos de su amor en el mundo. Que nuestras vidas reflejen la gratitud por esta increíble oportunidad que es la vida.