Escritura
Levanta de la miseria al pobre, Y hace multiplicar las familias como rebaños de ovejas.
En el contexto del pasaje vemos la bendición de Dios en respuesta a la obediencia del hombre y el juicio de Dios como consecuencia del pecado del hombre. En el texto vemos dos bendiciones tremendas. La primera bendición es que “levanta de la miseria al pobre” Una persona pobre es aquella que no tiene nada, no puede alcanzar nada y por tanto depende totalmente de Dios para su cuidado, liberación, provisión y sustento. Hay dos tipos de pobreza en este mundo una es la pobreza física en la cual la persona no puede satisfacer las necesidades físicas básicas por falta de recursos como la alimentación, la vivienda, la educación, la asistencia sanitaria, el agua potable o la electricidad. Y la otra es la pobreza espiritual en la cual el hombre vive en la miseria a consecuencia de su pecado, sin ningún tipo de recurso y esperanza que lo acerque a Dios. En estos dos casos Dios promete ayuda y misericordia. Para el hombre pobre físicamente promete levantarlo y suplir todas sus necesidades y para el hombre pobre espiritual promete darle los recursos en Cristo por medio del cual pueda llegar a Dios tal y como es. La segunda bendición que notamos en el texto es que “hace multiplicar las familias como rebaños de ovejas.” Una de las bendiciones más grandes que Dios da a sus hijos es que hace que sus familias aumenten, muchos no verían esta promesa como una bendición sino más bien como una maldición. Hoy en día no está muy de moda el tener hijos y menos aún el tener una familia numerosa. ¿Cuál es la razón de todo esto? Muchos desean una casa más lujosa, un carro del año o unas lindas vacaciones en algún país extranjero, y un hijo será un estorbo y una carga para cumplir estos planes, otros dicen “los hijos hacen pobre a un hombre rico” sin darse cuenta que han entendido las cosas al revés, pues los hijos no hacen pobre a un hombre rico sino más bien hacen rico a un hombre pobre”. El hombre rico nunca podrá llevarse su riqueza al cielo, pero un hombre que ha guiado a sus hijos al conocimiento de Dios tendrá a sus hijos en el cielo ya que ellos son herencia de Jehová. A lo largo de estos años Dios ha sido muy bueno conmigo, cuando vivía en miseria y pobreza a causa de mi pecado él ha sido mi libertador, cuando estaba hundido en el foso del pecado, él me levanto por su misericordia, cuando estaba en la más oscura celda con algunos harapos de justicia personal, el me vistió con vestiduras blancas. Cuando no había dinero para mis estudios universitarios, Dios se encargó de proveer cada una de mis necesidades; cuando tenía una familia y no tenía trabajo Dios abrió las puertas de una forma asombrosa para laborar en una institución importante, cuando vivía en alquilado y no contaba con una casa propia Dios me dio una casa a un precio muy cómodo, y no solo eso, sino que también cuando me encontraba luchando con la soledad y la depresión él me dio una hermosa esposa un hermoso hijo y una gran familia en la fe. Esa es la promesa de Dios y él es fiel en cumplirla. Dios los bendiga. Corpus Unum.
Enlaces
5Otros archivos en esta serie
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
