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Discipulando A Otros
Evangelizando
Pastor - Ricardo Robinson
(Centro De Vida)
Aired on Sep 21, 2022
Sep 21, 2022
Duración:
00:14:32 Minutes
Vistas:
7

Escritura

Marcos 16:15; Romanos 1:16.

Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. Marcos 16:15 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego. Romanos 1:16

Evangelismo es la práctica más común del discípulo de Jesús. Es así porque evangelizar es un mandato a todo discípulo. No es algo que puede elegir hacer uno, si es que lo desea hacer, es algo obligatorio. Uno no puede llamarse discípulo de Jesucristo, sino comparte el evangelio con otros, en Marcos 16:15 encontramos este mandato de Jesús a sus discípulos: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura”.   ¿Y qué es el evangelio? El evangelio es la buena noticia de que hay esperanza para el hombre pecador en la persona de Cristo Jesús. El apóstol Pablo dijo en Romanos 1:16: “Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree”. El evangelio es el mensaje que anuncia que el hombre pecador, quien está condenado al infierno, puede ir al cielo si tan solo se arrepiente de sus pecados y acepta a Jesús como su único y suficiente Salvador. Es el mensaje más precioso que uno podría proclamar, y sin embargo hay quienes tienen pena de anunciarlo, pues temen ser acusados de locos. Pero gracias a Dios el verdadero discípulo de Jesús no teme anunciarlo; él sabe lo que ha sucedido en su ser; él conoce el poder del evangelio; él sabe que al principio se van a burlar de él, pero que luego se van a dar cuenta que su mensaje es verás; y prefiere ser ridiculizado hoy, que le llamen loco a ser acusado de poco amor en el futuro. Yo prefiero que se burlen de mí hoy, y no que en el futuro me miren con odio y me digan ¿Por qué no me avisaste de esto? El tiempo es tan corto, quizás nosotros pensemos en la vida como una gran cantidad de años y consideramos a cien años como si fueran mil; pero la vida, en comparación a la eternidad, es sólo un segundo. Santiago 4:14 dice que nuestra vida es como “neblina que se aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece”. En vista de esta realidad el discípulo debe aprovechar cada oportunidad que tiene de compartir el evangelio con otros. Porque podría ser la última vez que él tiene para compartirlo con alguien, o podría ser la última vez que la otra persona tendrá la oportunidad de escucharlo. El refrán “El tiempo es oro” es verídico, y debido a ello es que el discípulo de Jesús se preocupa, o necesita preocuparse por usar bien su tiempo buscando oportunidades para compartir su testimonio, y aprovechando cada oportunidad que se le presenta. Teniendo en mente lo valioso que es el tiempo, quiero compartir algunas cosas que pienso servirán para aprovechar las oportunidades a lo máximo. Quiero compartir algunos principios que podemos utilizar en nuestro diario evangelizar. Una cosa que podemos hacer es buscar la oportunidad de pedir un favor, esa es una manera magnífica para comenzar una charla con alguien; Jesús usó este medio cuando pidió a la mujer samaritana que le diera de beber, no le pidió algo difícil de hacer, ni algo que fuese fuera de lo común; Jesús tenía sed y le pidió que le hiciera el favor de darle agua. Esto sorprendió a la samaritana, porque los judíos nunca se humillarían a pedirle un favor a un samaritano, preferirían morir. Nosotros vivimos en un mundo de autosuficiencia donde pedir un favor es indicar debilidad, sin embargo, cada persona tiene necesidad de ser útil, y cuando ayudamos a otros a entender que ellos son importantes, entonces hemos logrado algo bueno por muy pequeño que sea el favor. Yo he entablado buenas conversaciones con todas clases de personas por medio de pedir favores insignificantes como “¿Podrías explicarme lo que significa esto?” o “¿Podrías tenerme estos libros mientras me amarro el zapato?”; o “¿Sabes tú cómo se hace esto?”. Claro está que algunas cuantas personas no tiene tiempo, pero la mayoría de las personas sí, y esto abre la puerta a una amistad la cual nos permite entrar al corredor de evangelizar. Sólo una advertencia antes de continuar no pidas cosas difíciles como “¿Podrías cambiarle la llanta a mi carro?” o “¿Podrías darme dinero?”. Pide favores sencillos, que no cuestan, queremos abrir puertas, no cerrarlas. Otra cosa que podemos hacer para evangelizar es llamar la atención con algo llamativo, cuando Jesús habló con la samaritana Él despertó en ella un interés con las palabras: “Si conocieras el don de Dios y quién es el que te dice dame de beber; tú le pedirías y Él te daría agua viva. Cualquiera que bebiera de esta agua volverá a tener sed; más el que bebiera del agua que Yo le daré, no tendrá sed jamás”. Seguro está que la samaritana quería saber más acerca de esta agua que le saciaría la sed para siempre, y es así como Jesús le agarró la atención, y luego pudo hablarle de su necesidad de la salvación. Jóvenes pueden usar playeras o camisetas que lleven palabras que llamen la atención, permitiéndoles testificar de su salvador. El otro día miré a un joven con una camiseta que llevaba las letras: “D.N.H.T.C.T.”, al preguntarle qué significaban esas letras me dijo: “Dios No Ha Terminado Conmigo Todavía”, y entró a una conversación explicándome de cómo Jesús había entrado en su vida y cómo Dios diariamente le estaba ayudando a vencer obstáculos en su camino. He visto a otros usar un prendedor por ejemplo de un anzuelo, cuando otros le preguntan: “¿Qué significa ese anzuelo?”, ellos responden: “Significa que soy un pescador de hombres” y comienzan a ganarles para Cristo. Una cosa muy importante que debemos recordar en cuanto a evangelizar, es no dejar que nos desvíen de presentar a Cristo, cuando Jesús estaba hablando con la samaritana ella intentó, sin querer hacerlo, desviarse del tema de su necesidad de salvación varias veces; pero Jesús siempre regresaba al tema de su salvación. Muchas veces al hablar con otros ellos te harán preguntas bíblicas que no tienen nada que ver con ser salvo y aceptar a Cristo. Al tratar de desviarnos del tema debemos usar astucia, ser cortés y regresar al tema, si no nunca llegaremos a ninguna parte. Necesitamos comprender que esta podría ser la última vez que alguien les puede hablar de Cristo, no debemos desviarnos del tema. Uno de los errores más comunes en evangelizar es el de hacer menos los pecados que la persona ha cometido, al evangelizar uno tiene que decir la verdad, no medias verdades; la verdad es que todos somos pecadores y a menos de que recibamos a Cristo como nuestro Salvador, vamos a terminar en el infierno. Podemos ser excelentes personas a vista del mundo, pero a la vista de Dios el hombre es pecador. Yo he visto a muchos evangelizar diciendo: “Pero recibir a Jesús no tienes que dejar de hacer nada de lo que estás haciendo, lo importante es recibirle”, pero eso, eso es completamente falso, uno no puede recibir a Jesús como Salvador a menos de que esté dispuesto a abandonar todo para Él; no puede haber fe en Jesús sin antes haber arrepentimiento en el corazón del pecador y seguro está que la persona no podrá dejar de hacer lo que hace sin antes recibir a Jesús, pues es Jesús quien hará el cambio en su vida. Pero si tiene que haber un reconocimiento de que estoy viviendo en pecado y que ya no deseo continuar viviendo de esa manera, tiene que haber ese reconocimiento. Lo más importante en cuanto al evangelizar a otros es ser sensitivo al liderazgo del Espíritu Santo. Si somos sensitivos a su dirección Él nos guiará en todo el proceso ayudándonos con las palabras que vamos a decir y haciendo su trabajo en el corazón de la persona que nos está oyendo. Es necesario vivir con el pensamiento de lo más importante en el mundo; y lo más importante no es alcanzar dinero, sabiduría ni fama; lo más importante es alcanzar salvación, y esto sólo se obtiene por medio de recibir a Jesús como Salvador. Así que lo más importante para nosotros los discípulos de Jesús es evangelizar y debemos hacerlo todo el tiempo, debemos evangelizar con nuestras palabras y acciones. El mundo debe oír de Cristo. Vamos a orar. Padre, así como Satanás y sus agentes venden su producto destructor al hombre, así nosotros también debemos representar a Cristo, no para la destrucción del hombre sino para su salvación. Señor hay demasiados hijos tuyos que mantienen callado el evangelio. Cada uno de nosotros debemos evangelizar y espero que usarás el estudio de hoy para animar a algún hermano mío en comenzar a evangelizar y pasar el mensaje de salvación a otros, Te lo pido en el nombre de Jesús. Amén.

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