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Adoración En El Hogar
Adoración En El Hogar - Parte 2
Pastor - Ricardo Robinson
(Centro De Vida)
Duración: 00:14:30 Minutes
Listens:
1
Aired on May 05, 2020

Escritura

Jeremías 10:23; Romanos 3:9-12 y 23; Jeremías 17:9; Isaías 53:6; Salmo 119; Santiago 4:1; 1 Pedro 2:11; Efesios 6:10-13; 2 Corintios 10:3-4; Deuteronomio 6:5-9.

Conozco, oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos. ¿Qué, pues? Somos nosotros mejores que ellos? En ninguna manera; pues ya hemos acusado a judíos y a gentiles, que todos están bajo pecado. Como está escrito: No hay justo, ni aun uno; No hay quien entienda. No hay quien busque a Dios. Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles; por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá? Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; más Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.

Conozco, oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos (Jeremías 10:23). ¿Qué pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? En ninguna manera, pues ya hemos acusado a judíos y a gentiles que todos están bajo pecado, como está escrito no hay justo ni aún uno, no hay quien entienda, no hay quien busque a Dios, todos se desviaron, a una se hicieron inútiles, no hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno, por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:9-12 y 23). Esas palabras desesperadas de condenación en cuanto al caminar del hombre, hicieron necesaria la ayuda de Dios en los asuntos de la humanidad. La ayuda de Dios es provista para contestar a las necesidades del hombre, esta ayuda está expuesta en las sagradas escrituras, se obtiene por medio de Cristo Jesús y es aplicada por el Espíritu Santo. Hemos llegado a la segunda consideración del asunto en cuanto a la adoración en el hogar. Ya hemos examinado los principios básicos bíblicos para la adoración en el hogar, viendo el mandato, el ejemplo y las bendiciones de la adoración en el hogar. Ahora vamos a considerar la necesidad humana de la adoración en el hogar. Pasamos más tiempo en el hogar que en cualquier otra parte. Si no podemos reconocer la presencia de Dios ahí, pasaremos la mayor parte del tiempo separado de su presencia, eso no es necesario, ese es un camino peligroso. Debemos cultivar la conciencia, el reconocimiento del hecho que Dios está presente aún en la privacidad de nuestros hogares. Necesitamos a Dios en nuestros hogares por la perversión que existe en nuestros corazones. La Biblia enseña una verdad que llamamos la hereditaria y total depravación del hombre, eso simplemente significa que el hombre es débil desde el nacimiento en todos los aspectos de su naturaleza: mente, emoción, voluntad y cuerpo. Eso quiere decir que él no puede resistir con éxito cuando es tentado, significa que él necesita ayuda de afuera, ayuda divina, si no quiere ser esclavo del pecado. Por esa razón, él necesita a Dios en su hogar, también como en las reuniones de su iglesia. Escucha el testimonio de las escrituras, Jeremías 10:23 declara, “Conozco oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos”. La explicación de esa conclusión se encuentra en Jeremías 17:9, “engañoso es el corazón más que todas las cosas y perverso, ¿quién lo conocerá? Más allá en Isaías 53:6, encontramos una verdad concerniente a la raza humana en general, y a cada persona en particular, “todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino, más Jehová cargó en Él el pecado de todos nosotros”. La Biblia expresa claramente que necesitamos ayuda para hacer lo que Dios ha diseñado que seamos. La ayuda que necesitamos se encuentra en las sagradas escrituras, se nos manifiesta en el Salmo 119, ¡qué Salmo más maravilloso! Está compuesto de 176 versículos, los cuales están agrupados en 22 secciones, teniendo cada sección 8 versículos, es un Salmo alfabético en el idioma original según el alfabeto hebreo. La primera palabra de los primeros 8 versículos comienza con la letra “aler” la primera letra del alfabeto hebreo. La primera palabra de los siguientes 8 versículos comienza con la letra “bed”. La primera palabra de los siguientes 8 versículos comienza con la letra “gimel” y así sucesivamente usando el alfabeto hebreo. Otro aspecto importante del Salmo 119, es que 174 de los 176 versículos, hacen referencia directa a la palabra de Dios. Ese Salmo por sí solo, demuestra la importancia de la escritura en cuanto al problema de la depravación total de la naturaleza humana. La Biblia guarda a uno de la mentira, de la vanidad, de la avaricia, de la iniquidad y del camino de mentira, nos provee consuelo en la aflicción, nos guarda de la vergüenza, nos da luz para guiar nuestros pasos, nos provee protección y seguridad, nos da seguridad, promociona el entendimiento, nos asegura de la presencia de Dios, nos libra de aflicción, nos fortalece, produce alegría, alabanza, paz, entendimiento y ayuda. Imagínese, todo ese ministerio comunicado a tu corazón por medio de la palabra de Dios. Necesitamos a Dios en nuestros hogares a causa de la guerra que encaramos, existe una guerra espiritual en todo nuestro derredor, comenzó con la vana ambición de lucifer, quien quería exaltar su trono sobre las estrellas de Dios y ser como el altísimo, esta guerra ha venido fluyendo a través de la historia humana y hoy ha crecido en intensidad. Estamos envueltos en una guerra, aunque queramos o no. El apóstol Santiago explica la razón de nuestro conflicto interno diciendo que en nuestro ser se está llevando a cabo un concurso espiritual (Santiago 4:1). El apóstol Pedro escribió, “amados, yo os ruego como extranjeros y peregrinos que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma (I Pedro 2:11). El cristiano está involucrado en una guerra contra fuerzas espirituales, escucha lo que dice Efesios 6:10-13, “por lo demás hermanos míos fortaleceos en el señor y en el poder de su fuerza, vestíos de la armadura de Dios para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo, porque no tenemos lucha contra sangre y carne sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. Por tanto, tomad toda la armadura de Dios para que podáis resistir en el día malo y habiendo acabado todo estar firmes”. El apóstol Pablo, aun escribió más, “pues, aunque andamos en la carne no militamos según la carne porque las armas de nuestra milicia no son carnales sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas” (II Corintios 10:3-4). ¿Te hace realizar tu necesidad de la ayuda de Dios esa descripción de guerra espiritual que existe? Esa guerra es incesante, esa guerra está ocurriendo en tu iglesia, en tu tiempo libre, en tu trabajo y en tu hogar. Tú necesitas la ayuda de Dios en todo momento, no es suficiente encontrarse con Dios una vez por semana, no es suficiente un período de devoción de vez en cuando; cada miembro de tu familia se encara diariamente con los mismos conflictos espirituales que tú. La adoración en el hogar te fortificará a ti y a tus amados en contra de los ataques espirituales del enemigo de sus almas. Necesitamos a Dios en nuestros hogares a causa de las responsabilidades que tenemos para con nuestros hijos, ¡qué responsabilidad más solemne! Cada padre es responsable por la enseñanza apropiada de sus hijos. La adoración en el hogar tendrá una gran influencia en cuanto al caminar de tus hijos. Los hijos usualmente pasan 25 horas a la semana en la escuela, una hora a la semana en la escuela dominical y como 142 horas en el hogar, eso significa que el hogar es el lugar que tendrá más influencia en la enseñanza de sus hijos. El programa de la iglesia solo puede añadir a la enseñanza espiritual que tus hijos reciben en el hogar. Comúnmente, lo que es enseñado en el hogar tiene más influencia en la vida de los hijos que la enseñanza que ellos reciben en la escuela dominical o en la iglesia. ¡Sea un padre responsable! Deuteronomio 6:5-9 dice, “Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón y de toda tu alma y con todas tus fuerzas, y estas palabras que yo te mando hoy estarán sobre tu corazón y las repetirás a tus hijos y hablarás de ellas estando en tu casa y andando por el camino, y al acostarte y cuando te levantes, y las atarás como una señal en tu mano y estarán como frontales entre tus ojos y las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas”.

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