Yo dije: Atenderé a mis caminos, Para no pecar con mi lengua; Guardaré mi boca con freno, En tanto que el impío esté delante de mí. 2 Enmudecí con silencio, me callé aun respecto de lo bueno; Y se agravó mi dolor. 3 Se enardeció mi corazón dentro de mí; En mi meditación se encendió fuego, Y así proferí con mi lengua: 4 Hazme saber, Jehová, mi fin, Y cuánta sea la medida de mis días; Sepa yo cuán frágil soy. 5 He aquí, diste a mis días término corto, Y mi edad es como nada delante de ti; Ciertamente es completa vanidad todo hombre que vive. Selah 6 Ciertamente como una sombra es el hombre; Ciertamente en vano se afana; Amontona riquezas, y no sabe quién las recogerá. 7 Y ahora, Señor, ¿qué esperaré? Mi esperanza está en ti. (Salmos 39:1-7) Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores. (Marcos 2:17) Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente. (Lucas 13:3) El hombre que reprendido endurece la cerviz, De repente será quebrantado, y no habrá para él medicina. (Proverbios 29:1)

  Abramos nuestras Biblias al Salmos 39, vamos a leer los versículos 1-7. “Yo dije atenderé a mis caminos, para no pecar con mi lengua; guardaré mi boca con freno en tanto que el impío esté delante de mí enmudecí con silencio, me callé aun respecto de lo bueno y se agravó mi dolor, se enardeció mi corazón dentro de mí en mi meditación se encendió fuego y así proferí con mi lengua, hazme saber Jehová mi fin y cuánta sea la medidas de mis días, sepa yo cuán frágil soy, he aquí diste a mis días termino corto y mi edad es como nada delante de ti. Ciertamente es completa vanidad todo hombre que vive, ciertamente como una sombra es el hombre, ciertamente en vano se afana, amontona riquezas y no sabe quién las recogerá, y ahora señor ¿Que esperaré? Mi esperanza está en ti”.   Un día mientras un hermano leía el libro de Salmos, le vino una pregunta a la mente, la pregunta era la que hizo David en el Salmos 39:7, y ahora Señor ¿Que esperaré? David contesto su propia pregunta con la respuesta: mi esperanza está en ti.   Permítanme hacerle estas tres preguntas. La primera pregunta es esta ¿Qué esperas para arrepentirte y confesar tus pecados? Esto no es un mandamiento nuevo. Es una acción que hubieres hecho ya desde hace años atrás. Juan el bautista vino predicando el mensaje de arrepentimiento hace unos 2000 años pasados. Jesús mismo hizo la misma cosa diciendo “Arrepentíos porque el reino de los cielos está cercano”.   En Marcos 2:17 Jesús dijo que Él había venido a llamar a los pecadores al arrepentimiento, este fue su mensaje desde el principio de su ministerio. Jesús puso énfasis en cuanto a la necesidad del arrepentimiento cuando declaró en Lucas 13:3 “si no os arrepentís todos pereceréis igualmente”. ¿Qué es lo que esperas para arrepentirte y confesar tus pecados?, entre más tiempo tardas, más difícil se te hará. La Biblia nos enseña que el arrepentirse no es cosa fácil de hacer. Proverbios 29:1 dice “El hombre que reprendido endurece la cerviz, de repente será quebrantado y no habrá para él medicina. ¿No será más fácil para ti el confesar tus pecados en el futuro? Será más difícil, y si es así, ¿Por qué esperas?, ¿Por qué esperas para arrepentirte? No es porque no tienes pecado, la Biblia nos dice que “No hay justo ni a un uno, por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios”. Isaías 53:6 nos dice “Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino, más Jehová cargo en Él, el pecado de todos nosotros”. Gálatas 3:22 dice que “La escritura lo ha encerró todo bajo pecado” ¿Qué esperas para arrepentirte? Tampoco es porque no sabes, no puedes excusarte diciendo que eres ignorante en cuanto a eso. Hechos 17:30 dice “Pero Dios habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar a que se arrepientan”, entonces la ignorancia ya no es excusa, tú sabes que Dios demanda el arrepentimiento ¿Por qué esperas?   La segunda pregunta es ¿Por qué esperas para confiar en Cristo Jesús como tu Salvador? ¿No es por el hecho de que estás a salvo mientras esperas?, acuérdate del versículo que leímos hace unos segundos “Del hombre que reprendido endurecerá la cerviz, de repente será quebrantado y no habrá para él medicina”. Proverbios 6:15 dice, “Por tanto su calamidad vendrá de repente, súbitamente será quebrantado y no habrá remedio”.   En Lucas 12:16 Jesús nos habló de un hombre rico, la tierra de este hombre rico había sido tan bueno con él que le había dado mucho fruto, el hombre pensó “Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años, repósate, come, bebe, regocíjate” pero Dios le dijo “necio, esta noche vienen a pedirte tu alma. No estás seguro si esperas un tiempo para confiar en Jesús como tu Salvador, tal vez tú ni tienes mucho tiempo ¿Porque esperas para confiar en Cristo Jesús como tú Salvador? tal vez no tengas otra oportunidad. La Biblia nos enseña que no sabemos lo que nos traerá el mañana; la Biblia nos amonesta de que Jesús volverá en la hora que menos pensamos.   Isaías 55:6-7 nos dicen “Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano, deje el impido su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar”.   II Corintios 6:2 dice “En tiempo aceptable te he oído y en día de salvación te he socorrido. He aquí el tiempo aceptable, he aquí ahora el día de salvación”. Esta podría ser tu última oportunidad de aceptar a Jesús como tú único y suficiente Salvador. ¿Por qué esperas para confiar en Jesús como tu Salvador? Tampoco es porque Jesús no te está llamando. Mateo 11:28 nos dice, “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados y yo os haré descansar”.  Si, Jesús te está llamando ¿Por qué esperas?   Mi tercera y última pregunta ¿Por qué esperas para seguir a Jesús?, ya vimos que Él te está llamando. Jesús dijo en Mateo 4:19 “Venid en pos de mí y os haré pescadores de hombres”. ¿Por qué no sigues a Jesús? ¿Por qué esperas? Jesús demanda que le sigamos, Juan 12:26 dice “Si alguno me sirve, sígame y donde yo estuviere, allí también estará mi servidor, si alguno me sirviere mi Padre le honrará” ¿Por qué esperas para seguir a Jesús?   No es porque Él no nos haya dado el ejemplo, Juan 10:4 dice, “Y cuando os ha sacado fuera todas las propias, va delante de ellas; y las ovejas le siguen, porque conocen su voz”. El camino de Jesús es el único que te puede llevar al cielo, es el mejor camino, es el camino más seguro y es un camino de mucho gozo.   Mi amigo ¿Qué es lo que esperas? Tu única esperanza es Jesús, ya no esperes el arrepentirte, ya no esperes el confesar tus pecados, ya no esperes confiar en Cristo como tu Salvador, ya no esperes el seguir a Jesús. Padre te pido en este momento que permitas que mis amigos no tarden en recibir a tu Hijo como Salvador de sus almas . En el nombre de Cristo Jesús te lo pido todo. Amén.