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Una Nueva Perspectiva
El Mundo A La Vista De Dios
Pastor - Ricardo Robinson
(Centro De Vida)
Aired on Ago 04, 2022
Jul 30, 2022
Duración:
00:14:32 Minutes
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2

Escritura

1 Juan 2:15-17; Isaías 40:15-17

No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. 16 Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. 17 Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. 1 Juan 2:15-17 He aquí que las naciones le son como la gota de agua que cae del cubo, y como menudo polvo en las balanzas le son estimadas; he aquí que hace desaparecer las islas como polvo. 16 Ni el Líbano bastará para el fuego, ni todos sus animales para el sacrificio. 17 Como nada son todas las naciones delante de él; y en su comparación serán estimadas en menos que nada, y que lo que no es. Isaías 40:15-17

Hoy llegamos a nuestro cuarto estudio en nuestra serie de mensajes sobre una nueva perspectiva, en nuestros pasados estudios hemos visto que no tenemos que afligirnos por no saber mucho de la Biblia cuando aceptamos a Cristo porque tenemos que pasar por un proceso de crecimiento al igual que cuando nacimos físicamente, pronto con el estudio de la Palabra podremos desarrollar crecimiento espiritual y pararnos firmes en principios bíblicos, estudiamos también de la fórmula que hará crecer al bebé espiritual: la Biblia, la oración y el testificar de Cristo.   En el estudio pasado vimos que debemos echar mano a la enseñanza del Espíritu Santo y tener cuidado porque Satanás luchará fuertemente por destruir nuestro caminar con el Señor, es sumamente importante que tengamos una perspectiva correcta de nuestra situación, es importante saber que las cosas no son siempre lo que aparentan ser, si Satanás puede hacernos tener una perspectiva equivocada concerniente a Dios entonces podrá controlarnos a su antojo.   El diablo ha sembrado el pensamiento en la mente de muchos que en vista de que Dios es amor el hombre puede hacer lo que quiere aquí en este mundo y cuando lleguemos al final de los tiempos Dios perdonará a todos incluyendo al diablo, qué lindo, ¿verdad? Lo único malo con esta filosofía es que Dios no solo es amor también es justo y en su justicia tiene que castigar al pecado, Dios en misericordia ha provisto un escape para el pecador, si el pecador se arrepiente de sus pecados y acepta a Cristo como su Salvador puede alcanzar el perdón de Dios, si no irá al infierno, eso es lo que Dios ha dicho y Él no miente. Dios no tiene que ver las cosas desde el punto de vista del hombre, es el hombre quien tiene que ver las cosas desde el punto de vista de Dios, Él es el Creador, nosotros somos la creación.   El hijo de Dios tendrá que tener la perspectiva de Dios si es que quiere crecer y tener madurez espiritual, no puede ver las cosas desde su punto de vista, debe ver las cosas a través de los ojos de Dios y únicamente puede hacer eso por medio de basarse en lo enseñado por la Biblia, abramos nuestras Biblias en 1 Juan 2:15-17 y tratemos de ver hoy al mundo, pero al mundo a la vista de Dios, 1 Juan 2:15-17 leamos: “No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre”. Como podemos ver en esos versículos el hijo de Dios no debe tener amor para lo que el mundo puede ofrecerle, su pensar y su corazón deben estar lejos de las atracciones del mundo, el hijo de Dios tiene una tarea que cumplir y no puede permitir que el mundo le distraiga de lo que es más importante, el hombre tiene la tendencia de maravillarse ante lo que el mundo representa, en su mente limitada el hombre queda asombrado por lo que ha logrado hacer, ya hemos hasta enviado a un hombre a caminar sobre la superficie de la luna, yo mismo he desayunado en un país y cenado en otro que estaba a miles de kilómetros, por las pantallas de nuestros televisores podemos ver eventos que están ocurriendo al otro lado del mundo segundos después de que suceden, no exagero al decir que al hombre se le ha hinchado un poco la cabeza por sus logros científicos, hemos vistos países poderosos con sus ejércitos y sacamos pecho al ver el poderío de nuestros ejércitos, en todo esto a muchos se les ha olvidado de que existe un Dios y que es Él quien tiene sumo control y autoridad de los asuntos, hemos llegado a tener a la creación y nos hemos olvidado del Creador, ¿y qué es lo que Dios dice de nuestras poderosas naciones? Pues para ver si Dios está impresionado con los logros y el poder de las naciones solo tenemos que ir a su palabra, Isaías 40:15-17 dice: “He aquí que las naciones le son como la gota de agua que cae del cubo, y como menudo polvo en las balanzas le son estimadas; he aquí que hace desaparecer las islas como polvo. Ni el Líbano bastará para el fuego, ni todos sus animales para el sacrificio. Como nada son todas las naciones delante de Él; y en su comparación serán estimadas en menos que nada, y que lo que no es”.   Aparentemente Dios no es intimidado por el poder del hombre, me parece a mí que Dios no está muy impresionado con lo que el hombre puede hacer, hay tres cosas que provienen del mundo y las tres son pasajeras: en primer lugar del mundo provienen los deseos de la carne, entre esos vendrían el deseo de comer, el sexo y otras cosas que la carne pide de nosotros, ahora, sabemos que participar de comida y sexo dentro de los límites que Dios ha establecido está bien pero existen personas que no controlan sus apetitos carnales sino que sus deseos los controlan a ellos, el mundo siempre estará dispuesto a llenar esos deseos, pero los que somos hijos de Dios debemos controlar nuestros deseos y hacerlos sujetarse a la voluntad de Dios.   En segundo lugar, del mundo provienen los deseos de los ojos, siempre el mundo presenta al pecado de una forma atractiva, algo agradable a los ojos, piensa en ellas, cuando vemos un anuncio de cervezas o cigarros nunca vemos a alguien tirado en su propio vómito, nunca vemos a alguien hablando por un tubito que tiene insertado en su cuello debido a que sus cuerdas vocales fueron comidas por cáncer, nunca, siempre vamos a ver a jóvenes saludables y atractivos, claro ¿y por qué? Porque el mundo nos da una perspectiva totalmente contraria a la perspectiva de Dios. En tercer lugar, del mundo provienen la vanagloria de la vida, aquí tenemos un joven que lo han hecho estrella de cine, cree que está encima de todo el mundo, pero mañana se accidenta en un automóvil, ¿puede su fama regresarle la vida? Claro que no, como dijo el sabio Salomón: “Vanidad de vanidades, todo es vanidad”. Todo lo que este mundo promete es pasajero y esa es la forma que nosotros debemos ver al mundo, desde el punto de vista de Dios y el mundo intentará que nosotros miremos las cosas desde su punto de vista, pero no vale la pena. ¿Sabes? Aún el Señor Jesús fue tentado en las tres áreas que terminamos de mencionar: en primer lugar, al ver que Jesús había estado sin comer por varios días cuando fue llevado al desierto para ser tentado por el diablo, Satanás quiso hacerle caer por medio de tentarle en someterse al deseo de la carne, en este caso el hambre que tenía. Quiso que Jesús usara sus poderes divinos de manera egoísta por medio de cambiar una piedra en pan, Jesús no lo hizo. En segundo lugar, el diablo le mostró todos los reinos de la tierra y le dijo que si se postraba delante de él para adorarle le daría todo lo que le había mostrado, o sea que quiso tentarle por medio de usar los deseos de los ojos, nuevamente Jesús rechazó su oferta. En tercer lugar, el diablo trató de hacer tropezar al Señor Jesús con el asunto de la vanagloria de la vida, llevó al maestro al Pináculo del templo y le dijo que si se lanzara para abajo y probara que era Hijo de Dios, otra vez Jesús sabía que él estaba tratando de hacerle usar sus poderes divinos para exigirse y no cedió a la tentación y el diablo fue vencido una vez más.   Como hijos de Dios nosotros tenemos que ver las cosas desde este mundo a la vista de Dios, muchos creyentes tienen un amor profundo para las cosas de este mundo y hacen mal porque Dios no nos ha puesto aquí para enredarnos con los quehaceres de este mundo, como hijos suyos nosotros debemos ocuparnos nuestro tiempo en asuntos espirituales, asuntos como ganar almas, instruir a otros en el camino de nuestro Padre Celestial, desde el punto de vista de Dios el mundo es un lugar donde nosotros decidimos nuestro eterno destino, podemos elegir al cielo por medio de recibir a Jesús en nuestros corazones o podemos elegir una eternidad en el infierno por rechazar a Cristo y vengar nuestras vidas al mundo pero es aquí donde todo esto se hace. El creyente debe reconocer que su tiempo aquí es corto comparado con la eternidad y que debe aprovechar bien su tiempo por medio de servir a Dios. Para terminar, deseo leerles un versículo más, se encuentra en Santiago 4:4 y dice: “¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios”.   Vamos a orar. Padre, ayúdanos a fijarnos en el mundo desde tu punto de vista, no permitas que seamos engañados por las artimañas de Satanás y las mentiras que nos dice, ayúdanos a reconocer la realidad de que solo tú eres bueno, ayúdanos porque te lo pedimos en el nombre de Jesús. Amén.

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