A Jehová cantaré en mi vida; A mi Dios cantaré salmos mientras viva

“A Jehová cantare en mi vida” ¿Cuál es una de la razón por la cual el salmista expresa estas palabras? En el contexto vemos que es por la bondad y la grandeza de Dios demostrada en la creación. Nuestro Dios es un Dios grande y maravilloso, él gobierna sobre todo lo creado. Su agua, su aire, su pan y la belleza de su creación es solo una muestra de su amor. Dios nos dio su agua, el nutriente más importante que nuestro cuerpo necesita para vivir. Esta participa en todas las funciones corporales a tal punto que uno podría vivir de 5 a 7 semanas sin comer, pero no podría vivir más de 5 días sin agua. Nos ayuda en la memoria, aumenta la eficacia del sistema inmunológico, es el principal lubricante entre articular, y mantiene la piel suave, los ojos brillantes y el cuerpo ágil. El agua es una de las maravillas que nuestro Dios creo. También nos dio su aire cargado de oxígeno, ¿Qué sería del hombre si por unos cuantos minutos, Dios se descuidara del aire que respiramos? Pasaría algo trágico, la sangre dejaría de llevar oxígeno a cada célula del cuerpo, y solo bastarían de tres a quince minutos para qué miles de células cerebrales mueran y dejen de trabajar, el hombre moriría en pocos minutos. Sin embargo, Dios tiene el control de todo lo que pasa en el universo entero. Es por eso que cada respiro nos debería traer a la mente el amor sublime de Dios para con nosotros. Dios nos dio su alimento, nosotros solo tenemos que sembrar, y él se encarga del resto. muchos dicen “yo no le debo nada a Dios, yo trabajo con mis manos día y noche, y todo lo que tengo lo debo a mi esfuerzo y dedicación” … ¡Oh necio! Si tan solo supieras, que, si hoy puedes pararte para ir al trabajo, es solo por la gracia de Dios. Es Él quien creo los alimentos y permitió que estos se metabolicen en la maravillosa fábrica del cuerpo y así generen energía para cada uno de tus movimientos. ¿Acaso tú hiciste algo? Todo lo hizo él. Cada mirada, cada asombro, cada sonrisa que nace del contemplar su creación también debería inclinarnos a alabar a nuestro gran Dios. ¿Por qué se tomó el tiempo en hacer las cosas tan bellas? Al ver la puesta de sol, la variedad en las estaciones del año, las flores de diferentes olores, formas y colores. Cada riachuelo y gruta que vierte su agua cristalina, cada animal con su diferente particularidad y función, cada estrella y planeta solar bien estructurado y miles de maravillas más que él hizo. Ante esto solo puedo exclamar: “Dios maravilloso y sabio, excelso en sobremanera; tu creación es solo una pisca de tu persona, una pequeña coma de tu grandeza, una diminuta tilde de quién eres.” Al ver las maravillas de la creación al salmista no le quedo más que decir “A Jehová cantaré en mi vida; A mi Dios cantaré salmos mientras viva”, él es el único digno de alabanza, él es el único digno de todo honor, nuestra voz y nuestra vida misma debe ser un canto agradable a nuestro Dios cada día. Debemos de vivir agradecidos y una manera de hacerlo es alabando y cantando a nuestro Dios por sus múltiples bondades. No salgas de casa hoy sin reconocer su grandeza y sin alabar el nombre de nuestro Gran Dios y Señor Jesucristo. Dios los bendiga. Corpus Unum