con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz

¿Por qué me comporto de diferentes formas según sea la ocasión? ¿esto se puede calificar como un comportamiento hipócrita? G… Esta es una pregunta que pocos se hacen, pero, usted tiene razón, cada día vivimos diferentes situaciones, usamos una forma de ser en casa (sin la presión social) comemos con más libertad, somos más naturales, etc. luego, usamos otra forma de ser en el trabajo, donde buscamos ser valorados, admirados y respetados, también tenemos una forma de ser con los amigos íntimos, y así, por el estilo usamos la forma de ser que nos conviene para manejar el instante y la situación. Esto se hace muy evidente porque muchas veces esto afecta las decisiones que tomamos y aun, las reacciones emocionales que manifestamos. Acaso, ¿Eso significa que nadie puede ser genuino e integro? Mire, si bien es cierto la Biblia nos dice que todos somos pecadores y que convivimos con el pecado diariamente, también es cierto que nos dice que somos santos en y por Cristo, la Biblia nos dice: “…dando gracias al Padre que nos ha capacitado para compartir la herencia de los santos en luz”. Entonces ¿Podemos vivir o no, siendo íntegros, aun cuando en la vida diaria nos comportamos tan diferentes? Claro que sí, un individuo se pueda comportar de formas diferente en contextos diferentes, sin embargo, su conducta tenderá a ser más o menos estable debido a los rasgos de su personalidad. La personalidad no debería cambiar con cada situación, cambia la forma de tratar a los demás, de manejar una situación en particular, pero, nuestra personalidad no debe cambiar. Y le voy a decir algo que lo va a ser saltar de su asiento, la personalidad de un cristiano no debería cambiar aun cuando peque. Porque todo su ser ya está impregnado de Cristo., el espíritu de Dios, ya invadió su personalidad, por eso es que las escrituras dicen: “De modo que, si alguno está en Cristo, nueva criatura es…” los cristianos nos adaptamos a cada situación, con el propósito de resolver los problemas diarios. El apóstol Pablo decía: “Sé vivir en escasez, y sé vivir en abundancia; en todo y por todo he aprendido el secreto…” ¿Cuál era ese secreto? Pues, el de adaptarse a cada situación para que no le afecte ni psicológica, ni física, ni espiritualmente, por eso el apóstol termina esta idea diciendo: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. La personalidad del cristiano ya no le pertenece al cristiano, ahora le pertenece a Cristo. Otra cosa sería si la persona cambia su personalidad en cada situación, eso sería hasta enfermizo, casi psicopático. La hipocresía es la acción o la actitud de fingir una personalidad que se adecue a la situación con el propósito de sacar un provecho personal o infringir un mal al prójimo. Si usted reconoce que ha cambiado su personalidad por esos motivos, revise su salvación o preocúpese en su crecimiento espiritual. ¡¡QUE DIOS ME LOS BENDIGA!!