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Advertencia: Tiempos Peligrosos
La Certeza De Tiempos Peligrosos
Pastor - Ricardo Robinson
(Centro De Vida)
Aired on Feb 15, 2021
Feb 15, 2021
Duración:
00:14:30 Minutes
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Escritura

1 Timoteo 4:1; 2 Timoteo 3:1; 2 Tesalonicenses 2:7-10; 1 Timoteo 4:2; Mateo 24:21 y 22; Isaías 57:20 y 21; Job 22:21

Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; 1 Timoteo 4:1 También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. 2 Timoteo 3:1 Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. 8 Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; 9 inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, 10 y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos. 2 Tesalonicenses 2:7-10

El aviso en la carretera me llamó la atención antes de que pudiera leer lo que decía. Estaba pintado en rayas anaranjadas y negras, tenía luces de precaución encima, estaba localizado justamente a la orilla del pavimento. Al acercarme más, el mensaje fue claro; decía: ‘Peligro. Construcción de Carretera Adelante’. Disminuí la velocidad de mi carro y me acerqué lentamente con precaución. El aviso había sido puesto ahí para mi seguridad y yo respondí al mensaje que me fue dado. De la misma manera, Dios ha puesto muchos avisos en nuestro camino. Estos avisos se encuentran en las páginas de las Sagradas Escrituras. Los avisos nos hablan de tiempos peligrosos que tenemos por delante. Vigilancia y precaución es notada en las vidas de personas que toman en serio los avisos que Dios ha puesto. Es más imperativo que hagamos caso a las leyes de Dios en la Biblia que a los avisos que encontramos en las carreteras. Existen 3 versículos primordiales que hablan de ese tiempo de peligro que vendrá sobre el mundo. Los textos son: 1 Timoteo 4:1, 2 Timoteo 3:1 y 2 Tesalonicenses 2:7-10. Vamos a considerar esas 3 versiones de la palabra de Dios mientras que discutimos el tema ‘La Seguridad de Tiempos Peligrosos’. 1 Timoteo 4:1 dice: “Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios”. El texto nos indica que la causa detrás de la salida es una crisis de autoridad. Por años los hombres han argumentado sobre el pensamiento de que, si existe una autoridad última en el universo, y, si existe, qué es. Algunos han declarado que existe un Dios personal, revelado en la Biblia. Ellos creen que su voluntad es la máxima autoridad en el mundo de hombres y ángeles. Otros dicen que no hay Dios; no existe nadie involucrado con la humanidad y su voluntad no hace ninguna diferencia en las obligaciones de los hombres, sea que obedezcan o desobedezcan. La revelación de la Biblia de que algunos apostatarán de la fe indica el hecho de que el hombre hará a un lado el pensamiento de que fue creado por Dios y que debe obedecer sus mandamientos. El resultado de poner a un lado la autoridad de Dios resultará en caos para el hombre; la sumisión a la autoridad de Dios resultará en estabilidad y paz. El rechazo de la autoridad de Dios trae destrucción y problemas; es tan real hoy como siempre. Pobre la nación que no se sujeta al gobierno de Dios. El poner a un lado las responsabilidades que tenemos para con Dios comienza con la negligencia de asuntos espirituales, continúa con el rechazo de responsabilidades espirituales, termina en aceptar falsas doctrinas por escuchar a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios. ¿Cuándo vendrá este tiempo de apostasía? El texto nos dice que será en los tiempos postreros. El tiempo es indefinido. Eso nos indica que la apostasía vendrá al fin del tiempo presente; un tiempo que era en el futuro para cuando estaba siendo escrito por el apóstol Pablo. Nosotros entendemos que ese tiempo se desarrollará sobre un largo período de tiempo pero que intensificará en el período de tiempo inmediatamente antes del retorno de Cristo Jesús. Será relacionado a esos días trágicos antes de la gran tribulación. 2 Timoteo 3:1 añade al testimonio: “También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos”. Eso nos indica que el evento del que estamos hablando será más que un simple cambio de religión. Esos días serán peligrosos; serán un tiempo de grandes problemas y dificultades, pero eso es que la Biblia nos da un aviso fuerte. Esos tiempos son llamados peligrosos porque el cambio hecho será el de apartarse de lo divino para seguir en el error, sugestionado por demonios. Algunos se apartarán de la Fe. El artículo definido la fe nos indica referencia al sistema de doctrina que es el corazón y alma de la revelada religión. Es decir, algunos se apartarán de la fe sería decir que dejarán de confiar, pero el apartarse de la fe significa apartarse del sistema de doctrina que nos es dada en la Biblia. ¿Qué llega a ser la creencia de los que se apartan? Llegan a escuchar a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios. Pero, ¿por qué se apartaría uno de las verdades bíblicas para seguir enseñanzas de demonios? Pues, porque escuchan a espíritus engañadores. Eso nos da a entender que hay espíritus en el mundo que están con el propósito de engañar a hombres y mujeres. El propósito de ellos es de apartarles de la verdad de Dios revelado en la Biblia y de hacerles creen en las mentiras de Satanás. ¡Qué tragedia! Observemos el curso de los que han sido seducidos por demonios en 1 Timoteo 4:2. En el nombre de un sistema religioso, tal vez aún en el nombre de Dios, hablarán la hipocresía de mentirosos porque tienen cauterizada la conciencia. Oigamos lo que dice 2 Tesalonicenses 2:7-10: “Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos”. Las semillas del apartarse de la verdad ya estaban en retoño en tiempos neotestamentarios. Hace más que 19 siglos el apóstol Pablo escribió: “ya está en acción el misterio de la iniquidad”. Esa iniquidad ha tenido todos estos años para desarrollarse. Tal vez nuestra generación sea la que testifique la cosecha de esta iniquidad. Mateo 24:21 y 22 nos dice que ese tiempo será llamado ‘Tiempo de gran tribulación’, “cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá. Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados”. Pobre la generación que tenga que ver esos días, pero este es el seguro fin de todo hombre que vive sin Dios. La Biblia nos dice que el Espíritu Santo cesará su obra de detener el pecado entre los hombres y permitirá que las cosas agarren su curso. Dentro de 7 años después que esto acontezca el mundo se verá involucrado en una desorganización grande y catastrófica. El hombre aprenderá por experiencia que no puede vivir en paz sin Dios. Por otro lado, el reino milenial de Cristo verá al hombre viviendo en perfecta paz y armonía por mil años. Esa es la diferencia entre seguir la verdad de Dios y las mentiras del Diablo. Lo que será manifiesto a nivel mundial en los postreros tiempos, es manifiesto personalmente en corazones de humanos hoy día. La persona que intenta vivir sin Dios nunca puede descansar. Isaías 57:20 y 21, dice que su espíritu interno es “como el mar en tempestad, que no puede estarse quieto, y sus aguas arrojan cieno y lodo. No hay paz, dijo mi Dios, para los impíos”. Nosotros hemos experimentado eso en nuestro corazón. Job 22:21 dice: “Vuelve ahora en amistad con él, y tendrás paz; y por ello te vendrá bien”. Vamos a orar. Padre, te pedimos que nos ayudes en avisar a este mundo de los peligros que vendrán. Ayúdanos a estar atentos a las señales que están expresadas en tu palabra. Te lo pedimos en el nombre de nuestro señor Jesucristo. Amén.

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