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Soy cristiana y después de orar por muchos años por diferentes razones tengo que confesar que mis oraciones no han sido contestadas proporcionalmente. ¿No dice la Biblia que Dios responde cada una de nuestras oraciones? Haber, usted me dice que, si oro mil veces, debió tener mil respuestas, sin embargo, usted considera que solo recibió, digamos trescientas. Sabe, yo la apoyo en su queja, siempre y cuando esas mil oraciones hayan llegado a Dios, pero la Biblia dice así: “Y ésta es la confianza que tenemos en él: si pedimos algo según su voluntad, él nos oye”. Dios nos dice que, si oramos según las reglas de Dios, el nos oye, la pregunta escondida en este verso sería: ¿Qué pasa si no pedimos según las reglas de Dios? ¿Nos oirá o no? Pues, claro que no. Dios no es un juguete para que uno pueda tratarlo como quiera. Las reglas y los principios son de Dios no de los hombres y los hombres no la pueden cambiar, solo Dios. Ahora veamos que reglas son las que Dios estableció para que la oración llegue a él. A Dios se le tiene que orar con la verdad, la Biblia dice: “Tú, Señor, estás cerca de quienes te invocan, de quienes te invocan con sinceridad”. ¿Cuántas de esas mil oraciones fueron hechas con sinceridad? Conocí a un hermano que cuando le tocaba orar en el templo oraba alzando la voz muy fuerte, modulaba las palabras para que se escuchen con rimbombancia, gesticulaba con sus manos y hacia ademanes casi teatrales, ¿cree usted que estaba orando con sinceridad? Luego, la Biblia nos dice que Dios no escucha ninguna oración de un cristiano que está en pecado, a menos que sea una oración de arrepentimiento, la Biblia nos dice en el libro de Juan: “Sabemos que Dios no oye a los pecadores…” Dios no va a contestar a ningún hijo o hija que este en pecado con milagros o sanidades, por más que se le pida llorando, Él solo escuchará una oración de arrepentimiento del pecador, y no porque no quiere bendecir, sino porque Él, no las oye, no llegan a sus oídos, porque “…Él nos oye a los pecadores…” la Biblia nos dice: “Si mi pueblo…me busca y abandona su mala conducta, yo lo escucharé desde el cielo, y perdonaré su pecado…” por eso le decía al principio, hay reglas para que la oración llegue a Dios, no toda oración es oída por Dios, el apóstol Pedro escribía que las oraciones pueden ser estorbadas, él terminaba un verso así: “…para que vuestras oraciones no tengan estorbo”. ¿Entendió? Muchas oraciones no llegan ni al techo, por causa del pecado, las personas oran teniendo pecados no confesados, Luego, muchas oraciones también no llegan porque no son pedidos correctos, solo son deseos ambiciosos y particulares, La Biblia nos dice: “Y esta es la confianza que tenemos delante de Él, que, si pedimos cualquier cosa conforme a su voluntad, Él nos oye”. ¿Cuándo nos oye? Cuando pedimos conforme a su voluntad. Hay cristianos que hace años no saben lo que significa “Orad unos por otros”. Ahora, le haré una última pregunta: ¿“De esas mil oraciones que usted le hizo a Dios, ¿Cuántas cree que Dios pudo oír”? Recuerde algo, “la cantidad de respuestas que recibió de Dios, son igualmente proporcional a las que el oyó”. Nunca lo olvide, Dios responde toda oración que oye. ¡¡QUE DIOS ME LOS BENDIGA!! 

¿Tomamos la responsabilidad de nuestras palabras, sin culpar a la ignorancia? Esto es Palabra De Vida, a través de ¡Lifeword En Español!   

Bienvenidas a un nuevo episodio de perla de gran precio, el espacio donde buscamos tesoros en la palabra de Dios para aplicarlos en nuestra vida diaria. Hoy vamos a seguir hablando de un tema crucial como buscar la voluntad de Dios.

Dios escucha y atiende las oraciones sinceras de su siervo. Podemos ver como el salmista confía plenamente en que el Señor ha oído su clamor y responderá con misericordia, mostrando su cuidado y fidelidad hacia los que le buscan.

Este versículo nos enseña que la verdadera paz y seguridad provienen solo de Dios. Aunque todo alrededor sea incierto, quien confía en el Señor puede descansar tranquilo, porque Él guarda y protege a sus hijos.

Todos compareceremos ante el tribunal de Cristo, donde cada uno recibirá según sus obras; será un juicio justo que revelará nuestra fidelidad a Dios.

Seremos arrebatados con Cristo en las nubes para encontrarnos con Él y estar siempre a su lado, viviendo eternamente junto al Señor.

Este es un recurso muy util, es el primer capitulo del libro De Pastor a Pastor.

Debemos someternos a las autoridades humanas establecidas por Dios, pues son instrumentos suyos para castigar el mal y premiar el bien, mostrando así obediencia al Señor.

La autoridad civil es instrumento de Dios para castigar al malhechor y proteger al que hace el bien; servirle con respeto es obedecer a Dios mismo.