Observemos el rescate de una persona que está en peligro de ahogarse, la victima está en agua profunda haciendo movimientos desesperados con sus brazos y piernas sin tener resultado alguno, el salvavidas se acerca a la persona por atrás y agarra a la víctima. Con el terror de ahogarse, la victima sigue golpeando y pateando frenéticamente el agua, palabras de consejo aparentan no tener resultado, el que se ahoga está desesperado. Finalmente, se da cuenta de que lo están rescatando y él se rinde al salvavidas quien le lleva con seguridad a tierra firme. Esa es una experiencia que nos puede enseñar una lección espiritual muy importante, esta es la lección: Fe significa rendirse al control de otra persona, no hay verdadera fe en el significado bíblico de la palabra a menos que haya un rendimiento al control de Dios. Esa lección descansa en el corazón de la enseñanza cristiana en cuanto a la fe.