Escritura
Efe 5:15 Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, Efe 5:16 aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Efe 5:17 Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.
Hay un consejo que regularmente se escucha entre la gente del mundo: “vive la vida” solo hay una para hacerlo. A simple vista parece un buen concejo. Pero todos sabemos, el sentido, con el que se dice. Para el mundo vivir la vida o disfrutar la vida, sería igual a hacer lo que tú quieras, aun cuando aquello, no sea bueno o no tenga nada que ver con la voluntad de Dios. La propuesta que la gente del mundo hace, su consejo de vivir la vida, no necesariamente es el correcto. Leamos lo que nos aconseja la Palabra de Dios: Efe 5:15 Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, Efe 5:16 aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Efe 5:17 Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor. Si bien es cierto que los seres humanos, solo tenemos una única vida física, eso no es razón, para vivirla a como nos plazca, todo lo contrario: saber cómo aprovecharla y vivirla es vital. Algunos piensan que solo los jóvenes cristianos, que luchar con el estilo de vida hedonista, que el mundo quiere que vivamos, pero la verdad es que todo cristiano está llamado a obedecer a Dios, no al hombre y su sistema del mundo caído en el que vive. El mundo nos invita a todos a vivir y aprovechar el momento. A disfrutar la vida mientras podamos, no importando, o más bien no calificando, si es bueno o es malo, simplemente hay que hacerlo y gozar del placer. Miles de personas viven de una manera desenfrenada, desordenada tanto en lo moral, como espiritual. Bajo la excusa, que la vida es una y hay que vivirla, pero para ellos vivirla, es gozarla en lo pecaminoso, en aquello que más que vivirla, es estarla destruyendo y matarla lentamente. Lo peligroso de esta filosofía y practica pagana, radica en su contrariedad, en la sabiduría y voluntad de Dios. Cuando leemos la Biblia, nos encontramos con verdades, que van a modificar nuestra visión de la vida cotidiana. Por ejemplo, entendemos que a Dios le debemos temor y respeto. Ecl 12:13 El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. Pro 1:7 El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza. Amonestaciones de la Sabiduría