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**(Lo siguiente son reflexiones del viaje personal de la escritora a través de «The Bible Recap» de Tara-Leigh Cobble, un plan de lectura de la Biblia para leer la Biblia cronológicamente en un año. Para obtener más información sobre «The Bible Recap», visita [thebiblerecap.com](http://thebiblerecap.com/). Encuentra más publicaciones de esta serie en [lifeword.org/thebiblerecap.)](http://lifeword.org/thebiblerecap.))**
DÍAS 190 Y 191: LEE ISAÍAS CAPÍTULOS 1-8
Mis reflexiones:
Ahora estamos en el libro de Isaías. Es pesado. Es largo. Y es triste. Nos muestra el corazón de Dios, quien está afligido y enojado por la vagabundería de Sus hijos.
No parece que haya pasado mucho tiempo desde que esos niños estaban vagando en el desierto durante 40 años, soñando con los días en que tendrían la tierra de leche y miel que Dios les había prometido. Después de ser disciplinados durante una generación, ¡estaban listos para creer en Dios! Lo buscaron y Él les dio coraje y victoria para tomar esa tierra por la fuerza, ¡y lo hicieron! ¡Hicieron lo imposible!
Y Él les recordó que no lo olvidaran en su bendición… y no lo hicieron. Durante una generación.
Cuando Josué murió, se alejaron de Dios y cayeron en la idolatría. Perdieron su primer amor y le dieron la espalda. Él los atrajo de nuevo, una y otra vez. Y fueron leales… por un tiempo, siempre luchando por mantenerse fieles a su primer amor, el Señor. Rey tras rey los llevó por mal camino y ahora, después de generaciones de advertencias de Dios, están cosechando lo que han sembrado: discordia, conflicto y rechazo.
En estos capítulos de Isaías, sentimos el corazón de Dios cuando dice: «Crié hijos y los hice crecer, pero ellos se rebelaron contra mí» (Isaías 1:2).
Dios incluso usa analogías sobre lo leales que son los bueyes y los burros a sus dueños, ¡y sin embargo, Sus hijos no lo entienden!
Está cansado de corazones desvinculados en medio de los sacrificios, oraciones y festivales. Sus hijos han perdido de vista todas esas cosas, ¡es el corazón detrás de estos actos lo que Dios busca! Es como ir a la iglesia solo para «estar allí» sin involucrar el corazón. Es como decir la misma oración de siempre solo para decir «he orado por ello» sin involucrar el corazón.
Dios nos llama a todos a purificarnos y a comenzar a vivir sus mandamientos. Estamos llamados a amar a Dios sobre todas las cosas y a vivir ese amor. Estamos llamados a caminar en la luz de Dios y seguir Sus caminos.
¿Y sabes qué? Dios promete purificarnos con corazones arrepentidos: «Aunque vuestros pecados sean rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana…» (Isaías 1:18).
Para las personas que abandonaron a Dios, Él prometió que serían quebrantadas.
Que seamos como Isaías y reconozcamos nuestra indignidad y pecado, y nos humillemos bajo la poderosa mano de Dios. Que estemos dispuestos a dejar que Él nos use diciendo: «¡Aquí estoy, Señor! ¡Envíame!» Que recibamos el amor, la gracia, la misericordia y el perdón que nuestro Padre ofrece cada día.
Mi revelación de Dios hoy fue cuánto anhela Dios que Sus hijos acepten Su amor ágape y cuánto el pecado lo aflige. Como cualquiera de nosotros que somos padres, todos queremos que nuestros hijos nos escuchen y no vivan la vida de la manera difícil. Me sorprende la paciencia de Dios a lo largo de las generaciones de extravío. Su pueblo ha perdido el temor al Señor… y están a punto de recibir algunos recordatorios intensos de esto. ¡Oh amigos, espero que nunca perdamos nuestro temor a Dios!
DÍAS 192 Y 193: LEER AMÓS CAPÍTULOS 1-9
Mis Reflexiones:
¡Estoy tan feliz de estar en el Equipo de Dios!
Oh amigos, esto me recuerda que Dios es un Dios que busca nuestros corazones y es muy paciente con nosotros cuando estamos inmersos en el pecado, pero si no estamos dispuestos a apartarnos de ese pecado y buscarlo, Él nos disciplina. Como todos nosotros, los padres, el objetivo de la disciplina es cambiar los corazones de nuestros hijos lejos de aquellas cosas/personas que pueden llevarlos por el camino equivocado.
¿Pueden oír el dolor detrás de las palabras de Dios? Sí, Él es amor. Sí, Él es compasivo. Sí, Él es paciente con nosotros. Y sí, Él es un Dios de justicia. El pecado debe ser castigado.
Me encanta cómo Tara-Leigh dijo esto: «¿El pecado requiere un castigo? Sí. ¿Parece injusto? Absolutamente. Y lo más injusto de todo es que nunca recibiremos el castigo nosotros mismos porque Jesús lo tomó por nosotros.»
En estos capítulos, Dios recuerda a Israel todos sus pecados y cómo merecen ser castigados. También les recuerda quién es Él. ¡Y les ruega que dejen de buscar el mal y comiencen a buscarlo a Él! ¿No es este un tema que Dios ha estado enseñando a Sus reyes? Y sin embargo, hemos visto a muchos reyes hacer lo que hizo Israel: apartarse de buscar a Dios y volverse a la idolatría.
No estoy juzgándolos. Podemos ser iguales. Puede que no nos postrémonos ante ídolos, pero podemos postrarnos ante esas cosas que nos impiden darle todo nuestro corazón a Dios. Es fácil tratar de hacer que las cosas sucedan por nuestra cuenta, seguir esforzándonos por hacerlo todo por nosotros mismos. Es un desafío buscar a Dios y buscar Su guía en nuestras vidas… pero una vez que adquirimos el hábito, también es la sensación de mayor liberación porque no podemos hacerlo todo.
Una vez que renunciamos al control ante Dios, es cuando Él se convierte en el rey de nuestros corazones y dirige nuestro rumbo. Es entonces cuando nos convertimos en mujeres conforme a Su propio corazón. Cosas buenas suceden cuando entregamos nuestros corazones. Entramos en el plan y el propósito de Dios para nuestras vidas y experimentamos la paz de Dios. Y como ha dicho Tara-Leigh 193 veces en nuestro estudio: ¡Él es donde se encuentra la alegría!
DÍA 194: LEE 2 CRÓNICAS CAPÍTULO 27 E ISAÍAS CAPÍTULOS 9-12
Mis Reflexiones:
¡Oh amigos, ¿no querían leer más sobre el rey Jotam?! ¡Finalmente, un rey piadoso para Judá! Siguió a Dios durante todo su reinado, ¡aleluya!
Su hijo, por otro lado, ¡vaya que es un personaje! Llegaremos a él en el futuro… pero también tiene su historia.
Y luego llegamos a lecturas más difíciles… personas que caminan en tinieblas, que no buscan a Dios, que promulgan estatutos torcidos y escriben leyes opresivas. Personas rebeldes contra Dios.
No les va a ir bien. No se espera nada bueno para ninguno de nosotros en rebeldía contra Dios, o para aquellos que parecen seguir a Dios por fuera pero se rebelan por dentro.
Dios utiliza a Asiria para impartir justicia sobre Su pueblo… y luego ejerce justicia sobre Asiria.
Derriba los «árboles» fuertes y orgullosos y limpia el bosque de todos los árboles y matorrales con un hacha. En medio de este paisaje desolado de destrucción, algo hermoso emerge: «un renuevo crecerá del tronco de Isaí, y un vástago brotará de sus raíces y dará fruto».
Amigos, Él está aquí, justo en Isaías, comenzamos a escuchar sobre el hombre que ha cautivado nuestros corazones: Jesús.
Y la profecía sobre Jesús concuerda perfectamente con el Nuevo Testamento:
“Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová: espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová”. (Isaías 11:2)
«La justicia será cinturón de sus lomos, y la fidelidad, ceñidor de sus riñones.» (Isaías 11:5)
«Será llamado Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz.» (Isaías 9:6b)
«Y levantará pendón a las naciones, y juntará los desterrados de Israel…» (Isaías 11:12a)
«En aquel día dirás: Cantaré a ti, oh Jehová; pues aunque te enojaste contra mí, tu indignación se apartó, y me has consolado. ****He aquí Dios es salvación mía; me aseguraré y no temeré; porque mi fortaleza y mi canción es JAH Jehová, quien ha sido salvación para mí.'» (Isaías 12:1-2)
Amén, amén, amén.
Nuestro Dios es un Dios justo… y ¿saben qué? ¡Necesitamos que lo sea! Necesitamos que castigue el pecado. Cualquier disciplina que permita que suceda tiene como objetivo dirigir nuestros corazones hacia Él, y solo Él.
Y Su ira recaerá sobre aquellos que se oponen a Él, y Sus fuegos purificadores caerán sobre Sus hijos para fortalecernos y mostrarnos que donde se encuentra la alegría es en Él.
DÍA 195: LEE MIQUEAS CAPÍTULOS 1-7
Mis Reflexiones:
Muerte. Destrucción. Castigo.
Dios utiliza a Miqueas no solo para señalar los pecados de Su pueblo, sino también para emitir esta advertencia: «Porque he aquí, Jehová sale de su lugar, y descenderá y hollará las alturas de la tierra.» (Miqueas 1:3)
También dice: «¡Ay de los que en sus camas piensan iniquidad y maquinan el mal, y cuando llega la mañana lo ejecutan, porque tienen en su mano el poder!» (Miqueas 2:1)
¡Vaya!
Dios incluso le pregunta a la Casa de Jacob: «¿Se ha acortado el Espíritu de Jehová? ¿Son estas sus obras? ¿No hacen mis palabras bien al que camina rectamente?» (Miqueas 2:7)
Pero, como dice Tara-Leigh, Él recuerda, en medio de todas las predicciones de desastre, que preservará un remanente. Esto es esperanza para Su pueblo. Dios no los eliminará por completo.
De hecho, Dios traerá a este remanente de regreso al Monte Sion y les enseñará, una vez más, cómo caminar en Su luz, en Su camino. Me encanta esto.
¿Saben lo que me pareció más aterrador de todo? Miqueas 3:4.
Cuando Dios se dirige a los líderes de Jacob y les dice que odian el bien y aman el mal, luego dice: «clamaréis a Jehová, y no os responderá; antes esconderá de vosotros su rostro en aquel tiempo, por cuanto hicisteis malvadas obras.»
¡VAYA! Necesito a Dios, amigos. No puedo imaginar hacer la vida sin Él… y aquí tienen a Su pueblo eligiendo vivir sin Él, dándose cuenta de repente de que lo necesitan, pero Él ya no está allí. Han perdido lo mejor de sus vidas.
¿Cómo es posible que Miqueas pueda proclamar mensajes tan difíciles?
En Miqueas 3:8, él dice: «Mas yo estoy lleno de poder del Espíritu de Jehová…» ¡Amigos, tenemos ese mismo Espíritu que nos capacita para hacer cosas difíciles! Me encanta la confianza de Miqueas en Dios aquí.
¿Cómo sería si todos los hijos de Dios tuvieran esa misma confianza?
Un versículo que me resultó familiar fue uno que me ha ayudado en uno de los momentos más oscuros de mi vida: «Tú, enemiga mía, no te alegres de mí, porque aunque caí, me levantaré; aunque more en tinieblas, Jehová será mi luz.» (Miqueas 7:8).
Estamos destinados a levantarnos con confianza en nuestro Dios, amigos. Todos tendremos temporadas oscuras en la vida… pero no estamos destinados a quedarnos allí. Encontramos la luz y caminamos en ella.
DÍA 196: LEE 2 CRÓNICAS CAPÍTULO 28 Y 2 REYES CAPÍTULOS 16-17
Mis Reflexiones:
«Temen al Señor, pero…»
Más reyes malvados. No es solo que el pueblo de Dios se desvía, si no que se rebela abiertamente. Más súplicas de Dios para que lo sigan.
Nadie está escuchando. Ni siquiera los sacerdotes.
Solo cuando los leones entran en Israel, el rey conquistador, el rey de Asiria, se da cuenta de que hay un problema en esta nueva tierra que han conquistado. Envía a un sacerdote de los israelitas deportados para enseñarles acerca de Dios.
Pero la gente (siento que son personas de otras naciones) sigue haciendo ídolos. (Honestamente, el propio pueblo de Dios también lo hace, así que supongo que no importa realmente). En esencia, intentan adorar a Dios y a sus dioses.
Entonces, esto me hace preguntar: ¿Es este un verdadero temor al Señor? Para mí, esto es más miedo a Dios que reverencia a Dios. Ya sabemos que esto es adulterio espiritual y no es aceptable para Dios.
¿No sientes la tristeza y la ira de Dios en esto? ¿Acaso alguien está escuchando? ¿Alguien lo ama? ¿Alguien lo sigue buscando?
Tantas veces, Dios promete a sus hijos descarriados: «…pero teman al Señor y Él los rescatará de todos sus enemigos».
Amigos, incluso cuando sus hijos están en una rebelión directa adorando ídolos, nuestro Dios está tratando de ganar sus corazones aquí. Él no se da por vencido.
Si este estudio me ha mostrado algo, es el puro amor de Dios. No lo merecemos. Él podría aniquilarnos a todos y sería merecido. Y sin embargo, en medio de generaciones de idolatría, Dios todavía está tratando de demostrar su amor por su pueblo.
Y, como hemos visto, no escuchan. Cientos de años después, Él enviará a su Hijo para llamar su atención. Y, veremos, incluso entonces, que los corazones de las personas están endurecidos contra Dios y la verdad.
Vivamos en el temor del Señor. Encontremos la luz y caminemos en ella, si no vivimos en ella. Que Dios continúe mostrándonos que nuestros ídolos en la Tierra son inútiles y solo Él es digno de nuestros corazones.
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