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Es la temporada de fútbol americano y eso significa que es hora de ver películas de fútbol. Una de mis favoritas es El Lado Ciego. Pero hay un problema . . . 

Tal vez sea porque soy un ministro. O tal vez sea porque era muy obvio. De cualquier manera, Disney reescribió las Escrituras.

Quizás usted también lo captó. Cerca del comienzo de la película, cuando la cámara recorre el campus del entorno de la escuela secundaria, finalmente se posa en un arco de entrada, y ahí está. . . grabado en piedra. La cámara se ralentiza lo suficiente para que puedas leerlo:

“Con el hombre esto es posible.

Con Dios todo es posible.»

No sé si Disney pensó que la gente no notaría el pequeño cambio, pero para ser honesto, no es tan leve. De hecho, es enorme.

Mateo 19:26 en realidad dice: «Para el hombre esto es imposible, pero para Dios todo es posible.»

¿Ve la diferencia? Dos letras pequeñas – «im» – son la diferencia entre «posible» e «imposible.»

Las palabras de Jesús en Mateo 19 son en respuesta a una pregunta formulada por los discípulos.

El joven rico se ha ido triste porque no podía tragarse la idea de permitir que Cristo gobernara su vida en lugar de sus posesiones. Después de marcharse, Jesús les dijo a los discípulos lo difícil que es para un hombre rico entrar al cielo. Esto asombró a los discípulos porque pensaron que si alguien entraría al cielo, seguramente sería una persona rica y poderosa.

Así es como piensa el mundo: los grandes hombres pueden lograr grandes cosas, y Dios puede ayudar a esas pobres almas que no son tan grandes.

O tal vez lo hayas escuchado de otra manera: «Si te lo propones, puedes hacer cualquier cosa.» ¿En serio? Estoy bastante seguro de que nunca haré una volcada hacia atrás en una meta de diez pies sin un trampolín (y fisioterapia después).

La verdad del asunto es que incluso los hombres más poderosos están indefensos. Todo lo que han logrado depende completamente de Cristo. Les proporciona sus dones, talentos, habilidades, recursos y relaciones (Romanos 11:36). Nada es posible sin Cristo.

Y, lo que es más importante, ningún hombre puede ganar su camino al cielo; es un regalo de Dios (Efesios 2: 8). 

Por eso Jesús explicó lo difícil que es para un rico entrar al cielo. Y eso fue lo que llevó a los discípulos a preguntar: «¿Quién, pues, puede ser salvo?» en Mateo 19:25.

Jesús respondió: “Para el hombre esto es imposible, pero para Dios todo es posible” (Mateo 19: 26). ¡Wow! Todo el mundo necesita a Cristo, no solo unas pocas pobres almas que no pueden conseguirlo por sí mismas. De hecho, ninguno de nosotros puede «lograrlo.»

Supongo que Disney pensó que el mensaje de Cristo no encajaba en un tipo de película para sentirse bien y animarse. O tal vez determinaron que los hombres rechazarían la idea de que necesitan a Dios para todo, no solo cuando Él sea conveniente.

De cualquier manera, es una lástima. Porque, tarde o temprano, incluso los hombres más poderosos del mundo se dan cuenta de que hay algo que no pueden comprar con dinero ni manipular con poder: la verdadera alegría que solo trae la salvación. 

En toda la confusión, el sufrimiento, el abuso, la marginación, las acusaciones y la desconfianza, solo hay una persona que ofrece esperanza: Jesús.

En ese momento, los que aman las cosas del mundo reciben un duro golpe. . . desde el lado ciego.

Copyright © 2021 by Scott Attebery @https://scottattebery.com/christian-living/the-blind-side-of-the-blind-side-2/ Ninguna parte de este artículo puede reproducirse o reimprimirse sin el permiso por escrito de Lifeword.org.