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“Vosotros, pues, sois el cuerpo de Cristo, y miembros cada uno en particular.” ‭‭1 Corintios‬ ‭12:27‬ ‭RVR1960‬‬

La palabra vosotros es una referencia a la iglesia en Corinto, lo interesante es que a pesar de que esta congregación no era todo lo que uno esperaría que una iglesia fuera, Pablo al mirarlos les dice, vosotros sois el cuerpo de Cristo, la iglesia del Dios vivo.

El apostol pablo utilizo el cuerpo humano como una analogía para la unidad de la iglesia en Cristo. El cuerpo humano es un organismo muy interesante y maravilloso, desde las unidades básicas y funcionales llamadas células hasta los tejidos, órganos y sistemás, todo es una obra maestra de ingeniería, Dios nos creó así, y saben podemos aprender muchas cosas de ella en relación con la iglesia.

El cuerpo humano tiene tres características y estas son la unidad, la diversidad y la armonía y veremos como estas características se relacionan con la iglesia, quien es el cuerpo de Cristo.

En primer lugar todo cuerpo tiene unidad, nunca oí decir al corazón “quiero un día de licencia ya que estoy cansado de latir y latir” tampoco nunca oí decir al brazo me iré un par de metros mas allá, ¡no¡ todo el cuerpo esta unido, y tratar de cambiar esto simplemente dañará al cuerpo y lo que es peor dañara a aquel que desea salir de él, esta parte del cuerpo morirá. La esencia de un cuerpo es la unidad, somos un cuerpo. Cristo es la cabeza nosotros somos el cuerpo. Si nos separamos estamos muertos, no nos podemos separar, funcionamos como una unidad o no funcionamos. Cristo es la cabeza, de él viene la dirección, el poder, la energía y todos los recursos para hacer que cada parte del cuerpo funcione. Nadie puede ocupar ese lugar. Ahora si somos uno, debemos entender que nadie es mejor que otro, todos somos iguales ante Dios, todos nos necesitamos el uno al otro, todos debemos de servirnos por amor los unos a los otros.

En segundo lugar lo que caracteriza a un cuerpo es la diversidad, el texto dice “y miembros cada uno en particular” somos uno y sin embargo somos muchos, el cuerpo es uno, sin embargo tenemos brazos, piernas, oídos, ojos, etc, cada una con una función particular, lo mismo pasa en la iglesia, somos un cuerpo sin embargo cada uno uno tiene dones y talentos diferentes, nuestro deber es servir a los demás con el don o talento que Dios nos otorgó. Si tiene el don de ayudar, vaya y ayude a alguien, si tiene el don de enseñar, busque una clase y enseñe, si tiene el don de evangelizar , busque a alguien que no conoce a Cristo y evangelicelo, no espere a que alguien le un ministerio para hacerlo, vaya a buscar a alguien y practique su don.

En tercer lugar lo que caracteriza a un cuerpo es la armonía, todos estamos ministrando nuestros dones y estos se tienen que combinar. Todos nos necesitamos los unos a los otros, el hecho de que en el cuerpo existan miembros pequeños en estructura no significa que sean insignificantes, por ejemplo existe en el cuerpo una proteína que se llama hemoglobina, esta es pequeña en estructura, sin embargo si elimináramos de nuestro cuerpo esta proteína, solo bastarían de 3 a 5 minutos para caer en tierra y morir. Cuantas veces no he escuchado esta frase de muchos predicadores “nadie es esencial en la iglesia, si tu te vas otro ocupa tu lugar y ya” aunque suene bonito e interesante , esto no es verdad, cada miembro en la iglesia es esencial, y si este deja de funcionar el cuerpo ha de padecer por ello.
Así que no olvide, unidad, diversidad y armonía, eso es lo que tiene que caracterizar a la iglesia en nuestros días. En nuestra iglesia tenemos una frase que nos caracteriza y esta es “corpus unum” que significa un solo cuerpo, así es como tenemos que funcionar, así es como tenemos que vivir, así es como daremos gloria y honra a nuestro Dios.

–Paul Tinoco Huaraca