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“Pero el que tiene bienes de este mundo y ve a su hermano tener necesidad, y cierra contra él su corazón, ¿cómo mora el amor de Dios en él?” 1 Juan‬ ‭3:17 RVR1960

Aquí vemos a dos cristianos en situaciones diferentes, uno que en el área económica se encuentra bien, y otro que esta pasando por alguna necesidad en particular.

Saben la vida cristiana no es sencilla, va a ver momentos en los cuales gozaremos de abundancia, sin embargo también habrá momentos que tendremos escases, esto es contrario a lo que muchos falsos maestros con su falso evangelio de la prosperidad enseñan en nuestros días, ellos dicen “ven a Jesús y todos tus problemas terminarán, ven a Jesús y él te prosperará con buena salud, una casa nueva, un carro del año y una gran posición dentro de la sociedad” estos hombres utilizan a Dios solo como un medio para llegar al verdadero dios que realmente adoran que es el dinero.”

Dios no prometió que las cosas serían fáciles, el cristiano verdadero confía en Dios no importa la circunstancia que este enfrentando, el pastor John Piper comenta al respecto “Esto es lo que hace a Jesús verse glorioso, es cuando tu chocas tu carro y tu pequeña hijita sale volando por la ventana y cae muerta en la carretera y tu dices en medio del mas profundo dolor posible, Dios es suficiente, el es bueno, el es nuestro tesoro, el va a llenarnos, el nos ayudará”

Saben va a ver momentos en la vida en la que enfrentaremos días grises, días en las que el trabajo escaseará, días en la que pasaremos por alguna necesidad, como cristianos ¿Qué debemos de hacer al respecto? La respuesta es sencilla: “no cerrar contra ellos nuestro corazón”, sino por el contrario proveer de forma generosa y sacrificada para las necesidades de mis hermanos en la fe.

Cuan fácil es amar de palabras, pero el amor verdadero es mas que un sentimiento es un accionar, uno de nuestro presidentes de antaño decía lo siguiente “hechos y no palabras” y es así como debemos de mostrar nuestro amor al prójimo.

¿Qué necesidad tiene mi hermano en la fe que yo puedo suplir? Si es nuevo en la fe necesita que alguien invierta su vida en el o ella ¿estas dispuesto a dedicar horas cada semana en enseñar con tus palabras y con tu ejemplo lo que es vivir la vida cristiana?, si alguien en la congregación esta enfermo ¿estarías dispuesto a orar por tu hermano y visitarle en sus momentos de dolor?, si algún hermano a caído en pecado ¿estarías dispuesto en ayudarlo, restaurarlo y enseñarle a como dejar ese pecado? si alguien perdió el trabajo y esta pasando por alguna necesidad material ¿podrías tu darle una ofrenda que le ayude a salir de esa situación por la que esta enfrentando?

Si no estas dispuesto a hacerlo, el apóstol Juan te diría ¿realmente mora el amor de Dios en ti? en otras palabras ¿realmente eres cristiano?. Cuando uno entrega su vida a Cristo, una de las cosas maravillosas que ocurre es que el amor de Dios es derramado en nuestros corazones y ese mismo amor es el que ahora como un canal fluye a la vida de las demás personas?

Dios nos guíe en este día a mostrar nuestro amor por medio de nuestras buenas obras. Bien decía Martín Lutero, “Dios no necesita tus buenas obras, pero tu vecino si” tengamos un corazón abierto a las necesidades de los demás, no tomemos las cosas materiales fuertemente, sino suavemente ya que si Dios en cualquier momento decide llevárselas o nos inste a compartirlas con el necesitado, podamos desprendernos de ellas fácilmente.

–Paul Tinoco Huaraca