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“Porque ¿qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?” S. Marcos‬ ‭8:36‬ ‭RVR1960‬‬

Un hombre puede esforzarse incansablemente, trabajar día y noche y con el tiempo llegar a obtener todo lo que este mundo puede ofrecer, sin embargo, si no tiene a Dios, su vida se resumirá en un simple fracaso.

Muchas personas en el día de hoy no pueden ni conciliar el sueño con tal de que un día su foto aparezca en una revista famosa, sean nominados al Grammy, tengan en sus manos alguna estatuilla dorada u obtengan el premio Nobel, estas son personas que piensan que la fama y el reconocimiento personal es el todo en la vida y para obtenerlo serían capaces incluso hasta de vender su alma al diablo.

Por otro lado, están aquellos que laboran de 12 a 20 horas al día con tal de llenar sus cofres de oro, son personas que nunca están satisfechas con lo que tienen y siempre ansían el juguete del momento, su filosofía en la vida es “come, bebe y disfruta, que cuando mueras todo terminará” así que dedican su vida a la acumulación de riquezas, riquezas que un día serán únicamente invertidas en el viaje de sus sueños, en el platillo del momento, en una casa de lujo o en el automóvil del año.

Existe otro grupo que no está muy interesado en el dinero y la fama, pero si en el poder, su meta en la vida es estar en una posición en la cual puedan controlar al mayor número de personas, son aquellos que utilizan el engaño, la amenaza, la percusión y un lenguaje coloquial con tal que los demás estén a su servicio. El poder es todo lo que les interesa y cualquiera que se les oponga será simplemente el recipiente de todo su furor.
Todos aquellos que corren creyendo que la fama, el dinero y el poder es la meta en esta vida, un día se darán cuenta que “no ganaron la carrera” sino que lo perdieron todo, que son completamente pobres y que pasarán la eternidad en la miseria absoluta.

El mundo y todo lo que en él hay es pasajero, no importa cuánto nos aferremos a ella un día todo será consumido por el fuego, sin embargo, el alma vivirá para siempre. Con esto en mente ¿no es realmente algo absurdo y loco que una persona pierda el cielo y la gloria eterna por unos segundos de autocomplacencia en esta vida?

Alguien que ilustra bien lo que estamos hablando es el rico insensato. Lucas escribe de el lo siguiente “También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho. Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes; y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate. Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?”

Este hombre pensaba únicamente en el hoy y nunca dedicó tiempo para pensar en el mañana ¿Cuántos hay en el mundo que piensan de la misma manera?, bien dijo un teólogo “Ganar el mundo entero, pero rechazar a Cristo es perder el alma en el infierno. Pero renunciar a todo lo que este mundo ofrece por seguir a Cristo es ganar riquezas eternas”

¿Deseas ganar y tener éxito en esta vida? Simplemente rinde tu vida y tu alma al salvador ¿deseas que los demás ganen, así como tú? No dudes en comunicar el mensaje del evangelio e invierte tu vida en la vida de otros.

–Paul Tinoco Huaraca