Habiendo entrado Jesús en Jericó, iba pasando por la ciudad. 2 Y sucedió que un varón llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico, 3 procuraba ver quién era Jesús; pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de estatura.” Fue un chaparrito “4 Y corriendo delante, subió a un árbol sicómoro para verle; porque había de pasar por allí. 5 Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa. 6 Entonces él descendió aprisa, y le recibió gozoso.” Pero mira lo que pasa “7 Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a posar con un hombre pecador. 8 Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: He aquí, Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado. 9 Jesús le dijo: Hoy ha venido la salvación a esta casa; por cuanto él también es hijo de Abraham. 10 Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido

¡Hola! Bienvenidos de nuevo a nuestro lunes de Liderazgo y es un gusto tenerte aquí otra vez y estamos en medio de un estudio que se llama Haciendo Héroes o un Hacedor de Héroes y mucha de esta información está basado en un libro que se llama “Hacedor de Héroes” por el hombre Dave Ferguson. Hoy vamos a seguir hablando acerca de las cinco practicas esenciales para multiplicar a líderes y para hacer héroes. Primeramente, hablamos en la semana pasada acerca de pensando en la multiplicación, es un cambio pensar, perspectiva, un paradigma diferente. Y después hablábamos acerca de dar permiso, que tenemos que regalar oportunidades a otra gente para servir. Hoy quisiera hablar acerca de multiplicandos discípulos es la tercera práctica en esta lista de prácticas, la cuarta es activar dones y la quinta es trabajar para el reino. Hoy en el pensamiento de multiplicar discípulos te conviertes en un creador de héroes a través de la práctica de compartir lo que has aprendido al discipular a los líderes y no estar satisfecho hasta que los hayas multiplicado hasta la cuarta generación. Y la manera de hacerlo es hay que convertirse en mentor para otros líderes, hay que ayudar a los otros líderes para multiplicar discípulos hasta la cuarta generación.   Dos maneras, dos cosas muy importantes y tenemos que estar con la gente formando relaciones, puede dirigir un grupo pequeño, un ministerio de oración, una ubicación de una iglesia de varios sitios, una mega iglesia o incluso una red de iglesias. Pero para convertirse en un creador de héroes debe priorizar la multiplicación de discípulos, esta práctica representa una forma de compartir lo que aprende por medio de ser mentores de los otros líderes. En juan 3:22 la Biblia dice, “Después de esto, vino Jesús con sus discípulos a la tierra de Judea, y estuvo allí con ellos, y bautizaba”. El énfasis está en la palabra “que estuvo allí con ellos”, no podemos formar relaciones que van a multiplicar que van o van a tener una multiplicación sino estamos con la gente con al cual estamos trabajando.  2 Timoteo 2:2 dice “Lo que me has oído decir en presencia de muchos testigos, encomiéndalo a creyentes dignos de confianza, que a su vez estén capacitados para enseñar a otros”. En ese versículo tenemos Pablo primeramente porque él escribió el versículo y él había enseñado a Timoteo “lo que has oído de mi ante muchos testigos”. Tenemos Timoteo, el recibió el buen depósito de la sana doctrina de Timoteo y él tuvo la responsabilidad de encargar o encomendar este buen deposito a hombres fieles, personas fieles que pudiera enseñar a otros también. Esas cuatro generaciones actualmente es aún más porque cuando dice “para enseñar a otros” no hay límite en las generaciones que van a recibir el buen depósito de la sana doctrina, si somos fieles haciendo héroes.   Hay cinco cosas acerca de los multiplicadores de héroes. Primeramente, los multiplicadores de discípulos comienzan con unos pocos, no con muchos, muchas veces pensamos que cuando llegamos a 50 entonces podemos hacer algo, cuando llegamos a 100. Pero una relación de discipulado comienza con 1 persona, no puede tener 2 hasta que tiene 1, eso no puede, entonces no puede tener la cuarta generación hasta que tiene la primera generación. Los multiplicadores priorizan las relaciones no el plan de estudio, si usamos curriculum, usamos materiales, tenemos que tener algo que estamos enseñando, pero los materiales no son los más importante la persona es lo más importante y tenemos que adaptar a las necesidades de la persona cuando estamos invirtiendo en sus vidas. Los multiplicadores de discípulos se centran en la capacidad de envío por encima de la capacidad de asientos, queremos ver que la gente se vaya para servir al Señor, tal vez no quieran, pero está sirviendo en la iglesia, no está ahí solo para sentarse, no está ahí para tomar una silla, está ahí para trabajar para el señor. Y los multiplicadores de discípulos transfieren la voluntad o la autoridad en vez de aferrarse a ella, entonces es similar a dar permiso, porque cuando esta discipulando a alguien y quiere que esta persona comience a servir tiene que dar la autoridad para ir y hacer cosas nuevas, cosas que tal vez tu pudieras hacer mejor que ellos, pero ellos tienen que aprender. Hay que extender la autoridad para hacer la obra para hacer el ministerio. Y recuérdese que, para tener un cambio de paradigma, siempre hay miedo, siempre hay cosas que alguien piense “Oh yo no sé si yo puedo hacer esto o no” y hay varias. Primeramente, es el miedo del fracaso, y nadie quiere fracasar y si queremos multiplicar van a tener tiempos que la gente que estamos discipulando no van a ser exitosos en su obra. Pero no podemos permitir que ese miedo nos detenga de hacer héroes. También es el miedo al rechazo, hay una historia pequeña dice: “Larry se dio cuenta de que la multiplicación significaba permitir que las lealtades se transfirieran del pastor emisor al pastor plantador”, el contexto es tu estas enviando a alguien a plantar una iglesia y de repente se da cuenta que estas personas que van a ayudar, el plantador de iglesias va a ser leal a otro pastor. Este tipo de intercambio emocional requería una seguridad personal profunda la inseguridad es una forma de miedo por lo que enfrentó sus propios temores en términos de rechazo. Estaba yo suficientemente seguro en Dios y en mi propia identidad para enfrentar lo que se sentiría como una forma de abandono, y cuando enviamos o perdimos gente de la iglesia siempre hay un sentir que ¡ah! él, ellos me rechazaron. Pero a veces es solamente que Dios lo está usando en otra manera, no debemos parar la obra por el miedo del rechazo. Y rápidamente, porque el tiempo es corto. Tenemos un miedo, podemos tener un miedo de perder el control, si estamos multiplicando líderes; el miedo del conflicto siempre va a haber conflicto cuando hay crecimiento; el miedo del cambio, algunos de nosotros no queremos cambio y los más años que tenemos lo menos que queremos cambiar, pero tenemos que cambiar y tener cambios en nuestro ministerio; y el miedo de las dificultades financieras. Siempre hay miedo cuando estamos cambiando el paradigma, hasta multiplicando discípulos para que ellos vayan a servir. Pero Dios nos ha llamado a hacer discípulos, y Pablo escribió a Timoteo, que era “Pablo, Timoteo hombres fieles” y a otros también. Eso significa un crecimiento, una multiplicación exponencial y tenemos que ser intencional tratando de alcanzar la cuarta generación. Dios le bendiga, estoy orando que usted este haciendo discípulos y multiplicando discípulos hasta la cuarta generación. Dios le bendiga.