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Escritura
Y cuando vio las multitudes, subió al monte; y después de sentarse, sus discípulos se acercaron a Él. 2 Y abriendo su boca, les enseñaba, diciendo
El Sermón del Monte (Mateo 5:1-8:1; Lucas 6:17-49) Y cuando vio las multitudes, subió al monte; y después de sentarse, sus discípulos se acercaron a Él. 2 Y abriendo su boca, les enseñaba, diciendo . . . . (Mateo 5:1-2) Las Bienaventuranzas (5:3-12) Las bienaventuranzas son como proverbios Las personas en situaciones humildes son bendecidas si siguen a Jesucristo y Sus requisitos Sal y Luz (5:13-16) La sal preserva, purifica, y causa sed. Así es la influencia de los creyentes Como la luz brilla, el testimonio del creyente debe reflejar su relación con Jesucristo La Ley (5:17-48) Jesucristo vino para cumplir la Ley (el Antiguo Testamento) Porque en verdad os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, no se perderá ni la letra más pequeña ni una tilde de la ley hasta que toda se cumpla. (Mateo 5:18) 1 ¿Qué diremos, entonces? ¿Continuaremos en pecado para que la gracia abunde?2 ¡De ningún modo! Nosotros, que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él? (Romanos 6:1-2 Jesús provee instrucciones acerca de: La ira (5:21-26) El adulterio (5:27-30) El divorcio (5:31-32) El juramento (5:33-37) La retaliación (5:38-42) Amor por los enemigos (5:43-48) La Justicia Verdadera (6:1-18) Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos. (Mateo 6:1) La limosna (6:2-4): No debemos ayudar a los pobres par ser vistos por otros como los hipócritas. La oración (6:5-13): No debemos orar para ser oído por otros como los hipócritas; no debemos usar las repeticiones vanas cuando estamos orando; 9 Vosotros, pues, orad de esta manera: «Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. 10 Venga tu reino. Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo. 11 Danos hoy el pan nuestro de cada día. 12 Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros hemos perdonado a nuestros deudores. 13 Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal. Porque tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre jamás. Amén» (6:9-13) El perdón (6:14-15): los que no perdonan a otros no van a ser perdonados por Dios El ayuno (6:16-18): Los que ayunan no deben ayunar para ser vistos por otros
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