“Jehová miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres, Para ver si había algún entendido, Que buscara a Dios.”

Tenemos que reconocer que en el mundo existen personas que, por su conveniencia inmoral, prefieren aferrarse a no creer en la existencia de Dios. Pero hay otro grupo que cree que Dios existe, pero poseen un duro y malvado corazón, que no se somete a la voluntad de Dios.   La verdad es que la humanidad entera está bajo la influencia del pecado. Nadie puede ser encontrado perfecto, ya que solo Dios es perfecto. Todos somos culpables de pecado, todos estamos necesitados del perdón de Dios. Antes de jactarnos de ser personas buenas y mejores que otras, deberíamos reconocer nuestra necesidad de Dios en nuestras vidas.   Y precisamente, a esa acción, es a la que está atento Dios, con cada uno de nosotros. Dios no quiere ver a personas orgullosas, que no quieren reconocer su necesidad, tampoco personas amantes de lo malo o resignadas a su malvada condición.   Recurre a Jesucristo ahora mismo, Él puede salvarnos y cambiarnos, si tu muestra interés de un cambio de vida, Dios lo sabrá ahora mismo y vendrá en tu ayuda.