(CDV-Sula)
Escritura
Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra de perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti digo, levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa.
Jesús se refirió a sí mismo muchas veces como el hijo del hombre. La idea no era del “hombre perfecto” o del “hombre ideal”, ni siquiera del “hombre común”. En cambio, era referencia a Daniel 7:13-14, donde el venidero Rey de Gloria, viniendo a juzgar al mundo, tenía el título de hijo de hombre. Jesús usó este título a menudo porque en Su día era un título mesiánico libre de sentimientos políticos y nacionalistas. Jesús podría haberse referido más comúnmente a Sí mismo como “Rey” o “Cristo”, pero esos títulos, en los oídos de Su audiencia, sonaban como “el que derrota a los romanos”.
Otros archivos en esta serie
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)
(Centro De Vida)