Porque tú formaste mis entrañas; Tú me hiciste en el vientre de mi madre. 14 Te alabaré; porque formidables, maravillosas son tus obras; Estoy maravillado, Y mi alma lo sabe muy bien. 15 No fue encubierto de ti mi cuerpo, Bien que en oculto fui formado, Y entretejido en lo más profundo de la tierra. Salmos 139:13-15 Ahora pues, oye, Jacob, siervo mío, y tú, Israel, a quien yo escogí. 2 Así dice Jehová, Hacedor tuyo, y el que te formó desde el vientre, el cual te ayudará: No temas, siervo mío Jacob, y tú, Jesurún, a quien yo escogí. 24 Así dice Jehová, tu Redentor, que te formó desde el vientre: Yo Jehová, que lo hago todo, que extiendo solo los cielos, que extiendo la tierra por mí mismo. Isaías 44:1-2 y 24

Ya cuando pienso que lo he oído todo recibo nuevas noticias que me asombran, ya hemos dicho que la Corte Suprema de los Estados Unidos ha legalizado el matar a bebés, también debemos comprender que las Cortes han decidido que en caso de daños a una persona embarazada si algo le sucede al feto no puede ser tratado como daños personales, pues no se considera al feto como un ser humano hasta que haya nacido. Así que la madre no puede demandar al que la golpeó de parte del niño que lleva en su vientre y sin embargo en el mismo país los huevos de un águila americano son protegidos por la ley federal. Qué contraste y digo: ahora sí lo he oído todo, pero ¿Qué va a hacer? Luego leo esta historia en el periódico: “Agentes de la ley de conservación arrestaron a un hombre por matar ilegalmente a un venado fuera de tiempo y también por matar a dos fetos en el vientre del animal”. El arrestado declaró ser culpable y recibió una multa de ciento veinticinco dólares por cada feto y doscientos cincuenta por la madre. Otro hombre declaró tener parte en el asunto y fue multado de doscientos diez dólares, el periódico continuó para decir que el agente quien arrestó al hombre buscó sin encontrar un caso en donde hayan multado a otro individuo por dar muerte a un feto de venado, esto me enfurece porque ¿cómo es posible que le den más importancia a un feto de animal que al feto de un ser humano? Los mismos jueces permitirían dar muerte a un bebé no nacido simplemente porque los padres pensaran que nacería con defectos físicos y en vista de no poderlos enviar de nuevo a la fábrica permitirían su muerte ¿Y luego multan a uno por dar muerte al feto de un animal? ¡Esto es absurdo! Discúlpenme, pero esto me enfada. Se supone que los jueces de la tierra debieran levantar en alto las leyes que provienen de Dios, se supone que los jueces deben proteger a los débiles y sin embargo encontramos que se preocupan más por el feto de un animal que por el feto de un ser humano. ¿En qué clase de mundo vivimos cuando las leyes protegen a los huevos del águila y permiten dar muerte a un ser humano? ¿Hasta cuándo se va a detener esto? ¿Saben cuándo? Cuando nosotros nos decidamos hacer algo en cuanto a ello. El doctor Francis Schaeffer aceptó cuando dijo: “Los cristianos necesitan despertarse y ver lo que está sucediendo, los cristianos necesitan enojarse hasta el punto de estar dispuestos a pelear en contra de la inmoralidad”. Ya es tiempo que prediquemos contra la inmoralidad en nuestra época, ya es hora de luchar, ya no podemos quedarnos callados. Hoy, cuatro mil trescientos niños serán asesinados, serán puestos a muerte sin recibir ningún juicio, no recibirán la ayuda de un abogado defensor, serán ejecutados de una manera cruel e inhumana. ¿Quiénes son los conspiradores de este asesinato a sangre fría? La Corte Suprema de los Estados Unidos es uno de los asesinos y con ellos están los planificadores sociales del gobierno, muchos médicos y otros de quienes se esperaría la preservación de vida y no el asesinato. Después tenemos a los dueños de las clínicas de aborción, un negocio multimillonario, estos son seguidos por padres y madres quienes apoyan voluntariamente a la aborción, todos estos son los conspiradores de este crimen infame, te digo que cada uno de ellos responderán algún día delante de Dios y nosotros también si nos quedamos con las bocas tapadas y los brazos cruzados. Más de millón y medio de niños serán asesinados este año en América. El faraón quien mató a los niños menores de dos años en los tiempos de Moisés, y Herodes quien mató a los niños menores de dos años en tiempos de Jesús, tendrán que tomar un asiento trasero a los carniceros modernos de nuestra sociedad, aún Adolf Hitler podría excusarse al comparar sus asesinatos con la de nuestra América. Quiero que escuchen los tres requisitos que son necesarios para dar muerte a un niño. Número uno que el niño esté aún en el vientre de su madre, número dos que la madre desee la muerte del niño y número tres que el doctor esté dispuesto a matar el niño. Tres requisitos, el mundo nos ha bombardeado con un montón de mentiras tratando de justificar la aborción y hemos sido engañados, siempre tratan de asustarnos por medio de lanzar preguntas como: “¿y qué de este caso? ¿Y qué si sucede esto?” Escúchenme bien, ¿sabían que hoy es permitido dar muerte al niño aún en el momento del parto? Claro, el mundo nos dice que la aborción solo sucede en el primer trimestre del embarazo, en el segundo trimestre o a lo más tarde en la primera parte del tercer trimestre, pero no es así. Escuchen esta declaración del caso Roe vs Wade: “Es prohibido que el Estado prohíbe un aborto si en la opinión del médico la aborción es necesaria para preservar la vida o salud de la madre”. La mayoría de las personas no van a pelear con una aborción si la vida de la madre corre peligro, con eso no hay problema. ¿Pero qué quieren decir cuando dicen “Preservar la salud de la madre”? A mí me parece que la salud es un término que cubre mucho terreno, quiero decirles que este término cubre el territorio físico, emocional, psicológico, familiar y aún toman en cuenta la edad de la mujer para ver si es suficiente madura o no para el bienestar del bebé. En cualquier de estos casos el médico puede darle muerte al bebé. ¿Creen que estoy loco? Escuchen el resto de la declaración: “En esto se incluye cualquier situación que esfuerza a la mujer de vivir una vida deprimida”, o sea que si la venida de ese bebé va a estorbar a la madre hay permiso para matar al bebé, si el niño va a incomodar el estilo de vida de la joven madre entonces maten al bebé. Un amigo predicador testificó delante de un comité del senado en mi 1982, claro está que mi amigo es pro-vida y anti-aborción, cualquier predicador que está bien con Dios está en contra de la aborción. Dios tenga misericordia de aquellos predicadores quienes toman el lado pro-aborción, pueden llamarlo lo que quieran, la aborción es asesinato en frío. Bueno, al salir mi amigo del cuarto de conferencia una mujer se le acercó y comenzó a gritarle histéricamente, ella le dijo “¡Yo quiero que sepas que soy cristiana!” inmediatamente la antena espiritual de mi hermano subió, ella siguió diciendo “Lo que pasa es que usted no entiende el trauma de un embarazo esforzado”, el predicador miró fijamente a sus ojos y le dijo “Permítame decirle algo, jovencita. Usted me está traumatizando en este preciso momento, supongamos que usted es una inconveniencia para mí, usted me traumatiza. Supongamos que usted me está haciendo imposible la vida, usted me deprime. Supongamos que yo ahorita te voy a estrangular porque usted me incomoda”, claro está que le agarró la tensión y mi amigo le siguió diciendo “Por lo menos usted puede correr, puede gritar, usted puede buscar auxilio. ¿Pero el bebé qué puede hacer?”. Mi pregunta es esta: ¿Qué puede hacer ese bebé inocente? Si cualquier tiempo que una mujer no desea no tener su hijo y puede buscar a un médico carnicero que la ayude en abortar, ¿quién defenderá a ese bebé? Yo digo que nosotros lo haremos, yo digo que es hora de que tomemos pasos para terminar con estos asesinatos. Yo digo que el bebé tiene derecho de vivir.   Vamos a orar. Padre este tema nos trae gran tristeza, hoy levantamos nuestras voces en oración para aquellas madres que están contemplando una aborción. Padre, enséñales que ese niño tiene derecho de vivir y que el matarlo será ir en contra de tu voluntad. Padre, danos tu inteligencia para luchar en contra de estos asesinatos que se llevan a cabo en todo el mundo simplemente porque alguien no quiere ser responsable por sus acciones. Padre, ayúdanos porque te lo pedimos en el nombre de Jesús. Amén.